Foto: Cuartoscuro Los mandatarios se reunieron de forma privada, únicamente con una traductora, durante media hora, y después conversaron con sus respectivas comitivas en el Cabinet Room  

Bajo un ambiente de respeto y definiéndose como amigos, los cuales nunca estrecharon la mano en público, los presidentes de México y Estados Unidos acordaron trabajar juntos en el desarrollo económico, a partir de la entrada en vigor del Tratado México, EU, Canadá (T-MEC), y contra el Covid-19, en su primer encuentro bilateral y el primero en el extranjero para el mandatario mexicano.

Fue a las 14:07 horas, tiempo de Washington, que López Obrador arribó a la Casa Blanca, en cuya puerta ya lo esperaba el anfitrión; ninguno usó cubrebocas.

Los mandatarios se reunieron de forma privada, únicamente con una traductora, durante media hora, y después conversaron con sus respectivas comitivas en el Cabinet Room.

“América del Norte es de las regiones económicas más importantes del planeta; no obstante, mantenemos un déficit de 611 mil millones de dólares, lo cual se traduce en fuga de divisas, menores oportunidades para las empresas y pérdida de fuentes de empleo.

“(El tratado) busca revertir este desequilibrio mediante una mayor integración de nuestras economías”, resaltó el Ejecutivo mexicano durante la declaración conjunta que emitieron en el Rose Garden de la Casa Blanca frente a medios de comunicación.

Trump calificó el acuerdo como el más impresionante que tiene su país, y consideró que fue una gran victoria de las tres naciones con la que se logra la protección de los trabajadores”.

Recordó que México fue de los primeros países a los que se les ayudó para la adquisición de ventiladores para pacientes con Covid-19, y ha enviado un total de 600 equipos.

Agradecer ese apoyo fue el segundo motivo por el que López Obrador acudió a este encuentro, pese a la polémica que desató, le compartió a Trump.

“Pensaban que nuestras diferencias ideológicas habrán de llevarnos de manera inevitable al enfrentamiento. Afortunadamente ese mal augurio no se cumplió”.

El Presidente no dejó atrás a los migrantes, y le reconoció a Trump que, al menos desde que él tomó el cargo, “en vez de agravios hacia mi persona y hacia mi país, hemos recibido de usted comprensión y respeto.

“Agradecerle, presidente Trump, por ser cada vez más respetuosos con nuestros paisanos mexicanos”.

Trump -quien busca la reelección en noviembre próximo- reconoció que juntos han logrado avances “significativos” en control de flujo migratorio, así como que los mexicanoamericanos “son sumamente exitosos, son como usted, grandes negociantes, grandes personas y seres honorables”.

Trump agradeció la visita y destacó “Es un honor estar con todos ustedes”.

López Obrador habló 15 minutos, en los que lo mismo recordó a Benito Juárez como al ex presidente demócrata Franklin Delano Roosevelt que al republicano Abraham Lincoln. Trump, ocho minutos, y calificó como una ceremonia “bellísima” el que su invitado previamente haya colocado una ofrenda en el memorial de Lincoln.

El mandatario mexicano destacó el trato recibido: “usted no ha pretendido tratarnos como colonia, sino que, por el contrario, ha honrado nuestra condición de nación independiente. Por eso estoy aquí, para expresar al pueblo de Estados Unidos que su presidente se ha comportado hacia nosotros con gentileza y respeto, nos ha tratado como lo que somos: un país y un pueblo digno, libre, democrático y soberano”.

El estadounidense, quien se dijo conmovido porque realizó su primer viaje al extranjero a la Casa Blanca, también hizo señales con su puño en aprobación del discurso del mexicano, el cual elogió como “fantástico” y “ hermoso”.

Tras la firma del comunicado, Trump regaló su pluma al mandatario mexicano, éste se guardó la suya en el bolsillo interior del saco, el cual acompañó de una corbata con el águila juarista.

 

Contra los pronósticos

Durante la continuación de su gira a Washington, López Obrador ofreció un segundo mensaje conjunto, desde el Cross Hall de la Casa Blanca, donde afirmó que contrario a todos los pronósticos: “no nos peleamos, somos amigos y vamos a seguir siendo amigos”.

Y reiteró los beneficios del T-MEC el cual incorpora la obligación de garantizar mejores salarios y condiciones laborales a los trabajadores de las naciones integrantes.

Mientras que Trump señaló que ha mantenido una buena relación con López Obrador a pesar de las apuestas en contra y las adversidades, por lo que “han aprendido a no apostar contra nosotros”.
Previo a la cena convocada por Trump, el mandatario mexicano alabó a los empresarios que lo acompañaron.

“Vengo a esta cena a la que me ha invitado mi amigo, el presidente Donald Trump, acompañado de empresarios mexicanos, empresarios destacados, no sólo porque invierten, producen, generan empleos, sino, porque tienen una dimensión social, están pensando no sólo en la acumulación de ingresos, sino, en que también nos vaya bien a todos, que le vaya bien a nuestros pueblo”, dijo.

Entre ellos, Patricia Armendáriz, directora de Financiera Sustentable, la única mujer invitada, Carlos Slim, Carlos Bremer, así como integrantes de su Consejo Asesor Empresarial: Miguel Rincón, presidente de Bio Pappel y compadre del mandatario mexicano; Ricardo Salinas y Bernardo Gómez, entre otros.

Por parte de EU, estuvieron y tomaron la palabra empresarios del sector energéticos, como Gretchen Watkins, presidenta de la petrolera Shell; Jeff Martin, CEO de Sempra Energy; además de David Abney, presidente de la empresa de mensajería UPS y Fred Smith de FedEx, así como representantes del acero y de agroalimentacón, quienes expresaron sus planes de inversión en México.

La empresaria Patricia Armendáriz compartió en su Twitter detalles de la reunión privada.

Sobre el mensaje de López Obrador a los inversionistas estadounidenses, según la empresaria, les dijo que “estamos en la mejor disposición de favorecer sus inversiones en México”.

Tras culminar las actividades en Washington, el canciller Marcelo Ebrard consideró que “fue un gran día” para la relación bilateral.

Por la noche, Trump difundió en Twitter una grabación en la que destacó la importancia de la relación con México y presumió como una victoria el nuevo acuerdo comercial, una promesa de su campaña electoral anterior.

Se prevé que este jueves el Presidente regrese a México en un vuelo que hará escala en Miami, que hasta ayer registraba 51 mil casos de Covid, y ubicada en Florida, el tercer Estados con más contagios del coronavirus en EU.

LEG