Los impactos en la industria aérea tras el brote del Coronavirus continúan, luego de que cada vez más compañías informan sobre su debilidad financiera que en algunos casos, las ha obligado a solicitar rescates de privados para mantener su operación en los próximos meses.
Así fue el caso de la aerolínea británica Virgin Atlantic, que alcanzó un acuerdo de rescate privado con accionistas y acreedores por 1,500 millones de dólares para asegurar su futuro tras la pandemia del coronavirus.
Informó que el plan de reestructuración fue apoyado por la mayoría de sus accionistas y se espera que entre en vigencia este año.
Y es que Virgin Atlantic ha tenido que cerrar su base de Gatwick y recortar más de 3 mil 500 empleos en medio de la pandemia de Covid-19, que ha dejado los aviones en tierra, reduciendo de manera catastrófica la demanda de viajes aéreos.
“Los últimos seis meses han sido los más difíciles que hemos enfrentado en nuestra historia de 36 años. Hemos tomado medidas dolorosas, pero hemos logrado lo que muchos pensaron imposible”, dijo el presidente ejecutivo de la firma, Shai Weiss.
Por separado, la aerolínea Delta reportó pérdidas por 770 millones de dólares en su reporte del segundo trimestre del año, luego de verse afectada por la situación financiera de su socio Aeroméxico, quien se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras en Estados Unidos para reestructurarse financieramente.
Y es que Delta mantiene una participación accionaria de 49% en Aeroméxico.
AR