Vecinos y familiares de los masacrados el pasado 22 de junio en Huazantlán del Río, San Mateo del Mar, demandaron a los gobiernos federal y estatal, justicia y la reparación integral del daño para las 15 personas que quemaron vivas y 12 sobrevivientes.
Frente al Palacio de Gobierno, acusaron al agente de Huazantlán del Río, José Luis Chávez, como el directamente responsable de esta masacre registrada en esta comunidad.
Lamentaron que los muertos hayan sido el resultado del sistema rotativo de elección que se impuso en las agencias de San Mateo del Mar y que solo beneficia al Partido Revolucionario Institucional (PRI) partido en el que milita José Luis Chávez al garantizar siempre el triunfo en los procesos electorales.
Manifestaron que la permanencia del grupo del agente en el poder impedía a las mujeres participar en las asambleas, pero a las de filiación priísta si son tomadas en cuenta ya que su voto garantiza el triunfo en una elección.
Recordaron que las mujeres que el pasado 5 de mayo solicitaron medidas cautelares en esta capital ante la Defensoría, fueron las que al regresar a su comunidad recibieron golpes y pedradas por haberse atrevido a pedir justicia y el respeto a sus derechos.
Alejandrino Mora, uno de los sobrevivientes de la masacre, demandó justicia “para que los asesinos priístas paguen y sean detenidos, por eso estoy aquí, para que mis compañeros no sean olvidados, el 2 de mayo nos detuvieron, el 3 de mayo nos salvamos y regresamos a nuestras casas, después nos llegó la información de las mujeres que exigieron el respeto a sus derechos estaban en la cárcel y las acompañamos”.
“El 21 de junio estábamos con ellas cuando llegó la Guardia Nacional y junto con los grupos de José Luis Chávez, nos rodearon y nos apedrearon, nos defendimos como pudimos, los muertos también hicieron lo que pudieron, por eso demandamos justicia contra los asesinos priístas, porque a un mes las autoridades no han hecho nada”.
Uno de los abogados de las víctimas, William García, resaltó que ya han presentado sus declaraciones ante la Fiscalía de Oaxaca pero hasta el momento las investigaciones siguen sin avanzar.
EFVE