La propuesta de reforma al sistema de pensiones sí representará un mayor costo a las empresas y podría causar un ajuste a la baja en los salarios de los trabajadores, advirtió Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco BASE.
“En este momento de caída severa en la actividad económica, lo anterior pone aún más en riesgo la recuperación del empleo formal”, dijo en entrevista con 24 HORAS.
Resaltó que puede esperarse un ajuste a la baja en los salarios del país, gracias a que para los empleos formales actuales, una mayor aportación del patrón puede inhibir incrementos a los ingresos de los trabajadores en el mediano plazo. Lo anterior, afectaría el bienestar de las familias y se observaría un deterioro en el consumo.
“La reforma presentada es buena, porque sube la pensión que los trabajadores recibirán en el futuro. Sin embargo, no es el momento adecuado para su implementación, por la caída en la actividad económica”, concretó.
En tanto, Héctor Villarreal, profesor de la escuela de Gobierno del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), dijo que lo presentado por el Ejecutivo sólo resuelve los “pendientes” en materia de cuentas individuales de ahorro para el retiro, como semanas de cotización o montos de contribuciones patronales, pero no aborda temas como los esquemas de beneficio definido, donde los trabajadores activos aportan parte de su salario para financiar las pensiones de los
trabajadores retirados.
Y Carlos Ramírez Fuentes, expresidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), manifestó que una de las desventajas es que se pone en riesgo la carga laboral, es decir, que se pida más trabajo a los empleados.
AR