El legislativo brasileño realizó en 2019 una auditoría de fondos públicos de aquel país utilizados para construir la planta ubicada en la zona de Coatzacoalcos; señalan que el entonces coordinador internacional de la campaña de Peña Nieto recibió dinero de Odebrecht vía la petroquímica Braskem.
Una investigación del Congreso de Brasil asegura que el dinero que Odebrecht transfirió a Emilio “N” en 2012, durante la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, procedía de su filial petroquímica Braskem, que en aquellos días construía la planta Etileno XXI en Veracruz.
“Según las investigaciones, Odebrecht pagó un soborno al exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), el Sr. Emilio “N”, entonces coordinador internacional de la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, justo en el momento en que Odebrecht estaba participando en la construcción del complejo petroquímico en ese país (en referencia a Etileno XXI). Las transferencias fueron realizadas por Braskem, una subsidiaria petroquímica de Odebrecht”, dice textual el informe final de una investigación legislativa que en diciembre de 2019 fue entregado al Supremo Tribunal Federal de Brasil.
El reporte fue elaborado por una Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) del Congreso, que se encargó de fiscalizar los créditos otorgados por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social de Brasil (BNDES).
En el documento, de 395 páginas, se menciona que el gobierno brasileño otorgó una línea de crédito de 700 millones de dólares para la construcción de Etileno XXI, que es descrito como “el complejo petroquímico más grande y moderno de América”, y al menos 90 millones de dólares fueron aportados por BNDES, según consta en el contrato firmado el 19 de diciembre de 2012.
“El complejo fue construido en su totalidad por Odebrecht y tiene la capacidad de producir 1 millón de toneladas por año de polietileno, una materia prima para las industrias de construcción, consumo, automotriz y agrícola”, refiere el informe de la investigación legislativa.
El informe final de la comisión del Congreso refiere que se encontraron indicios de posibles actos de corrupción en las operaciones de BNDES entre 2003 y 2015 para financiar proyectos de empresas brasileñas en el extranjero, entre ellas Odebrecht y su filial Braskem.
Con información de MCCI
MGL