Interpol indicó este martes que los ciberataques crecieron de manera “alarmante” durante los primeros cuatro meses del año, en plena pandemia por Covid-19.
Según la organización policial, los criminales aprovechan los fallos de seguridad de compañías y organismos, con ataques dirigidos a los empleados que trabajan en sus casas, para sacar beneficios de ello.
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“Los cibercriminales están desarrollando e incrementando sus ataques a un ritmo alarmante, explotando el miedo y la incertidumbre causada por la inestabilidad social y la situación económica derivada de la Covid-19”, mencionó en un comunicado, el secretario general de Interpol, Jürgen Stock.
En un período de enero a abril del 2020, Interpol y sus socios detectaron unos 907 mil mensajes de correo basura, 737 incidentes relacionados con programas malignos y más de 48 mil enlaces maliciosos directamente vinculados con el virus.
Según Stock, la dependencia de internet está creando “nuevas oportunidades” para los delincuentes, sobre todo cuando individuos y empresas no se aseguran ante ataques en línea.
El panorama actual de la ciberdelincuencia muestra cambios en los patrones de fraudes electrónicos y robo de imágenes a través de las cámaras web, virus contra infraestructuras básicas o instituciones sanitarias, para infiltrarse en sistemas digitales y desviar dinero.
La organización alerta de una mayor circulación de información y noticias falsas que se extienden rápidamente entre los usuarios, algo que “ha contribuido a la ansiedad de comunidades y en algunos casos han facilitado la ejecución de ciberataques”.
Con información de medios.
EAM