Ante la falta de clientes en restaurantes de la Ciudad de México debido a la pandemia de Covid-19, en algunos se ha optado por vender insumos fuera de los establecimientos para aumentar las ganancias. Tal es el caso del establecimiento Peces, ubicado en la colonia Roma.
El activista Marco Antonio Rascón, dueño del restaurante especializado en pescado, afirmó en una entrevista con 24 HORAS que la gente aún tiene miedo de salir y son pocos los comensales que asisten al local.
De esta manera, como una forma de aumentar sus ventas, el propietario habilitó en la banqueta del restaurante un puesto de pescados y mariscos frescos.
“Vendemos en la banqueta un poco de pescado. Otro pequeño restaurante que teníamos lo convertimos en pescadería, para ofertar productos que puedan prepararse en casa”, señaló el empresario.
La medida ha conectado con la ciudadanía, pues son productos fáciles de transportar. En ese sentido, reconoció que mucha gente pide comida para llevar.
Rascón resaltó que durante la apertura de restaurantes y hasta la fecha, no han existido registros de contagios por Covid-19 dentro de los mismos.
“Una cuestión interesante desde que se abrió el Semáforo Naranja es que prácticamente no hay casos de ningún cliente, en ningún restaurante, que se haya infectado”, comentó.
A pesar de ello, indicó que existe miedo e incertidumbre de regresar al Semáforo Rojo, pues para muchos establecimientos seria sinónimo de un cierre definitivo.
Los tres meses que Peces permaneció cerrado representaron para Rascón un gasto de 600 mil pesos para el pago de nóminas y renta del local, mismos que fueron ahorros de años.
“Hoy el gran temor es que si regresamos al Semáforo Rojo, los más del 40% de restaurantes que estamos por quebrar o en una quiebra técnica, podríamos terminar en un cierre definitivo”, reconoció.
Para adaptarse al presupuesto con el que se cuenta, tuvo que recortar y modificar el menú; gracias a ello, las nóminas han comenzado a pagarse solas, sin embargo, hace falta más camino por recorrer.
Ayer, este diario público que, luego de casi tres meses de cierre por la pandemia, más de cinco mil restaurantes en la capital no volvieron a abrir, de acuerdo con Marco Antonio Buendía, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac) de la CDMX.
Buendía señaló que pese a que el Gobierno permitió la apertura de restaurantes a una capacidad máxima del 40%, en promedio se ha alcanzado 20%, pues la gente no sale a consumir.
FRASE
“Los restauranteros estamos intentando, con base en las últimas reservas de optimismo, salir adelante. Este año si llegamos a diciembre, va a ser un acontecimiento económico importante”
Marco Antonio Rascón
Activista y empresario
LEG