La aplicación de la vacuna contra Covid-19 en México no será para todas las personas, no obstante que el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador anunciara que sería de aplicación universal.
“No se debe entender el potencial acceso universal, a que necesariamente se tienen que vacunar a todas las personas”, aclaró el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell.
Dijo que si bien el gobierno federal está comprometido con un cambio radical en cómo se garantiza el derecho a la protección de la salud; al momento en que se tenga lista la vacuna de Covid-19, se estaría vacunando sólo a un sector de la población.
Entre ellos al personal de salud que esté altamente expuesto, a las personas mayores de 60 años que tienen alto riesgo de complicarse y, a personas con enfermedades crónicas; sin embargo, enfatizó que el esquema exacto se definirá por la Secretaría de Salud, “cuando tengamos conocimiento de las características de la protección que pudiera brindar esta o cualquier otra vacuna”.
En el marco de la conferencia vespertina donde se informó que México reportó este domingo 522 mil 162 personas contagiadas por Covid-19, es decir 4 mil 448 más que las reportadas un día antes que fueron 517 mil 714. Mientras que las defunciones incrementaron de 56 mil 543 a 56 mil 757 personas de sábado a domingo; el funcionario federal también refirió que no se debe apresurar la fabricación de las vacunas.
“En la historia de las vacunas han existido candidatos que están muy avanzados que pasan las pruebas de la fase 1, de la fase 2, la fase 2b y cuando se encuentra en la fase tres, desafortunadamente se ha encontrado que no son suficientemente eficaces o suficientemente seguras”, advirtió.
Incluso recordó que en su momento México fue de los primeros en adoptar algunas vacunas que después fueron sujetas a una enorme controversia mundial porque no habían logrado tener no sólo la eficacia si no la seguridad.
De esta forma, señaló que no se deben “quemar etapas, no debemos saltarnos requerimientos que son indispensables, concretamente el permiso sanitario que en México se llama autorización sanitaria, que es uno de los elementos más importantes de cuidar para que se haga, con absoluto rigor técnico-metodológico y estricto apego, a revisar con detalle toda la evidencia científica que puede respaldar que un producto, en este caso un candidato a vacuna, sea seguro, de calidad y eficaz”.
Dijo que si no tiene alguna de las características fiables en alguno de estos tres productos, puede no recibir un registro sanitario, “por más que deseamos tener una vacuna debemos ser muy conscientes que por razones de seguridad de las personas, no se deben anticipar las cosas hasta que se tengan esos resultados”.
No obstante, dijo que esto “no quita que se hagan proyecciones y se hagan cálculos sobre los escenarios posibles en los que se podría tener la vacuna” y, recordó que en el caso de Astra Zéneca y la universidad de Oxford, se ha dicho que el ensayo clínico en fase tres tiene contemplado tener los resultados en noviembre próximo, “le toca a las agencias sanitarias de regulación sanitarias del mundo, en México la Cofepris, revisar la evidencia”, advirtió.
Conferencia de Prensa #COVID19 | 16 de agosto de 2020 #GraciasPorCuidarnos https://t.co/x3Q0jNzqvI
— SALUD México (@SSalud_mx) August 16, 2020
DAMG