Resulta preocupante que la apuesta del Gobierno mexicano para la recuperación de la economía dependa de la celeridad con la que se apruebe la vacuna contra el Covid-19.
El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, aseguró, en pocas palabras, que la recuperación económica está atada a la aprobación de la vacuna, la que sea.
En buena medida tiene razón.
El turismo, una de las grandes industrias que más divisas y empleos genera, está casi detenida por el temor al contagio; y de ahí el efecto cascada: restaurantes, líneas aéreas, hoteles, líneas de autobuses, etcétera.
Casi detenida también y a niveles de 2010 se encuentra la industria de la construcción en buena medida porque el Gobierno federal suspendió toda la inversión pública en el sector, excepto en las construcciones del aeropuerto en Santa Lucía, la refinería de Dos Bocas y el Tren Maya.
El tema es qué más hará el Gobierno, además de esperar la milagrosa vacuna, para alentar el crecimiento económico.
Hasta donde se ha podido analizar el Paquete Económico para el próximo año los únicos proyectos de inversión pública son las tres obras emblemáticas del sexenio.
No se contempla inversión en otras obras como carreteras, escuelas, hospitales, presas; en infraestructura, pues.
Si el Gobierno pretende destinar el presupuesto solo a gasto corriente, es imposible tener un crecimiento del 4.6% como pretende el secretario Herrera.
Pero si además se desalienta la inversión privada en los sectores más atractivos, como son telecomunicaciones y energías fósiles y renovables, el escenario se pone más oscuro.
De los diputados depende la distribución del presupuesto.
Ya sabemos que los legisladores aumentan el presupuesto con dinero del banco de la ilusión: pueden corregir a la alza el precio del barril de petróleo o fijar un precio del tipo de cambio inferior al proyectado para hacer crecer la masa presupuestal.
Ya luego en el transcurso del año se hacen los ajustes, generalmente a la baja.
Por eso la gran pregunta es, además de esperar la cura casi milagrosa del Covid-19, ¿qué más hará el Gobierno federal para relanzar la economía?
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La presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, María del Rosario Piedra Ibarra comparecerá hoy al medidodía ante la Comisión del ramo en la Cámara de Senadores.
Morena aceptó la comparecencia de la controvertida funcionaria pero negociaba con la oposición los temas a tratar en el evento.
Si la oposición es al menos el 10% de lo crítica que ha sido estos días con Piedra Ibarra, la señora no tendrá un día de campo.
Ayer se acordó tener una mesa de trabajo en la Secretaría de Gobernación con los grupos de mujeres que tienen tomada la sede de la CNDH, pero ni eso será suficiente para contener las críticas de la oposición que de plano ya piden que renuncie.
A ver.
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El Gobierno del estado de México anunció que incrementará la vigilancia en Ecatepec, el municipio más violento de la entidad, a través de drones.
Puede que la tecnología bien empleada sea de ayuda para combatir a los delincuentes, pero si la operación limpieza no comienza con los funcionarios policiacos o incluso con las autoridades municipales, muchas veces señalada de estar coludidas con delincuentes, nada va a cambiar.
A ver cuánto dura el experimento de Alfredo del Mazo, porque por más intentos que han realizado otros gobernadores nomás no pueden con el paquete.