Al cierre de julio de 2020, los bancos del país acumularon ganancias por 65 mil millones de pesos, lo que implicó una reducción de 35.6% con relación al mismo periodo de 2019 y el séptimo mes consecutivo de pérdidas en utilidades dentro del sector, reveló la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Según el organismo, en el inicio del tercer trimestre de 2020, la cartera de crédito vigente alcanzó un saldo de 5 billones 458 mil millones de pesos, igual a un crecimiento de 0.9% frente a igual lapso del año pasado.
Al interior, en su comparación anual, los créditos comerciales aumentaron 2.8%, con 3 billones 570 mil millones de pesos; sin embargo, los financiamientos al consumo se desplomaron 8.9%, al tener 962 mil millones de pesos.
Dentro de este indicador, los créditos personales fueron los más afectados, con una baja de 17.5% y un saldo de apenas 171 mil millones de pesos; le siguieron las tarjetas de crédito, que registraron 359 mil millones de pesos y fue el equivalente a una contracción de 10.9%. Además, los créditos de nómina llegaron a 252 mil millones de pesos y descendieron 3.2%.
Respecto a los financiamientos para la Adquisición de Bienes de Consumo Duradero (ABCD), que acumularon 162 mil millones de pesos con un declive de 0.2% frente al cierre de julio de 2019, destacó el dinamismo de los créditos para la compra de bienes inmuebles, ya que registró un avance de 15.4% al tener 15 millones de pesos.
Por su parte, los créditos automotrices disminuyeron 1.6% anual con 146 mil millones de pesos.
En tanto, los financiamientos de vivienda crecieron un 5.4%, con un saldo de 925 mil millones de pesos. Dentro del segmento, las hipotecas para vivienda media y residencial presentaron un incremento anual de 7.2%, al tener 830 mil millones de pesos.
La CNBV precisó que el Índice de Morosidad (IMOR) del sector se ubicó en 2.9%, menor en 0.11 puntos porcentuales al nivel observado en el séptimo mes del año pasado.
Según la Asociación de Bancos de México (ABM), en septiembre se anunciará un programa de reestructuras de créditos para pequeñas y medianas empresas (PyMEs) que se vieron afectadas económicamente por la pandemia del coronavirus.
Dicha iniciativa será diferente al apoyo implementado para el diferimiento de pagos por cuatro o seis meses. Además, está siendo diseñada en conjunto con la CNBV al igual que con el Banco de México (Banxico).