Una inusual tormenta azotaba el viernes el oeste de Grecia, inundando calles, arrancando árboles de raíz y provocando cortes eléctricos en las islas Jónicas de Cefalonia, Zante e Ítaca.

Los bomberos dijeron que recibieron al menos 60 llamadas de ayuda, sobre todo para cortar árboles y sacar agua de casas y tiendas. En Cefalonia se hundió un barco.

El alcalde de Cefalonia, Theofilos Michalatos, dijo que no había heridos, pero que las casas, la infraestructuras de transporte y las instalaciones de agua resultaron dañadas. El impacto fue similar en Zante e Ítaca, donde los cortes de electricidad fueron también amplios.

La tormenta, bautizada como Ianos, que alcanzó el oeste de la península del Peloponeso en torno al mediodía, parecía más suave de lo estimado inicialmente, dijeron meteorólogos.

Un testigo de Reuters dijo que había fuertes precipitaciones y vientos en la zona de Pyrgos, en el Peloponeso occidental, donde las calles estaban vacías. Un barco en el Golfo de Ciparisa envió una señal de socorro, según la Guardia Costera.

“El ciclón permanecerá en el oeste con la misma intensidad durante 6-9 horas y entonces se debilitará y empezará a moverse hacia el sur”, dijo el viceministro de Protección Ciudadana, Nikos Hardalias.

La tormenta podría golpear también al centro de Grecia, donde se esperan fuertes lluvias, antes de llegar a la región de Atenas el sábado, dijo Hardalias.

Las autoridades dijeron que la intensidad y rumbo del ciclón no podía ser vaticinado con precisión. Estos ciclones aparecieron por vez primera en Grecia en 1995 y se han vuelto más frecuentes en los últimos años.

 

ICA