El presidente Donald Trump nominó este sábado a la jueza conservadora Amy Coney Barrett para integrar la Corte Suprema de Estados Unidos, lo que desatará una batalla en el Senado, de mayoría republicana, para su confirmación a poca más de cinco semanas de las elecciones.
Barrett estaba en la Casa Blanca con Trump cuando el mandatario hizo el anuncio. Trump la calificó como “una de las mentes más brillantes y talentosas de nuestra nación” en materia de justicia.
Si es ratificada para reemplazar a la liberal Ruth Bader Ginsburg, quien murió a los 87 años el 18 de septiembre, Barrett se convertirá en la quinta mujer en ocupar un asiento en el máximo ente judicial de Estados Unidos y extendería su mayoría conservadora a 6-3.
PAL