Durante la tarde de hoy, la jueza Gricelda Elizalde Castellanos vinculó a proceso a José “N”, por el delito de feminicidio y ocultamiento de cadáver contra la joven de 20 años, Alondra Gallegos.
La audiencia de aproximadamente dos horas, los elementos del Ministerio Público presentaron 16 pruebas referentes a entrevistas recabadas desde la desaparición de la víctima, incluyendo las pruebas de química forense luego del hallazgo del cuerpo sin vida que se encontraba en el domicilio de la colonia La Madrid, ubicada en Coahuila.
Uno de los datos brindados por las autoridades fue que el padre de José “N” llevó a su hijo a comparecer a la Fiscalía de Personas Desaparecidas cuatro días después de que la joven murió, donde aseguró que no la había visto hacía días.
Ese mismo día, el padre habría notado nervioso a su hijo, posteriormente, confesó el crimen y acudieron a un abogado, al día siguiente, el 26 de septiembre, dieron acceso a los elementos para el levantamiento del cuerpo.
Después de unos días, los policías hicieron la prueba Blue Star en el cuarto de José “N” donde se dieron cuenta que en todos los espacios de la habitación había muestras de sangre y prendas de la víctimas, así como bolsas negras que tenían indicios de violencia.
Los agentes hallaron indicios de que José cometió actos violentos post mortem al cuerpo de Alondra, con uso de armas blancas hacia el cuello, a lo que la jueza calificó como actos de dolo y contra la dignidad de la mujer.
Añadieron que el joven había intentado invitar a salir a la víctima en varias ocasiones, sin embargo, la fallecida nunca accedió.
Indicaron que la agredida tenía problemas económicos por lo que había acudido al domicilio para realizar trabajos de limpieza, mismo donde perdería la vida entre las 18:00 y 20:00 horas, el pasado 21 de septiembre.
Alondra ya no respondió su teléfono a partir de las 21:57 horas, luego de avisarle a un amigo con el que había estado antes de realizar los labores de limpieza en dicho domicilio que ya había finalizado, además; el mismo amigo le había regalado una pulsera, la que se halló en la escena del crimen.
Una vez que se dieron todas las pruebas, la jueza aprobó que desde el procedimiento de la investigación y hasta el posible juicio, el caso de Alondra será investigado desde perspectiva de género, incluyendo, a urgir la beneficencia de su hija de 4 años para acceder a las garantías considerada como “víctima indirecta”.
Cabe mencionar que los representantes legales del agresor no mostraron una prueba que contravenga la teoría del caso, por lo que se espera que en el lapso de cinco meses interpuestos para la investigación complementaria, el presunto asesino solicite un proceso abreviado para obtener beneficios para su condena.