Los diputados de la mayoría en la Cámara deberán acostumbrarse a que los partidos de oposición apliquen prácticas dilatorias como la toma de tribuna que realizaron el martes pasado, aseveró el diputado Antonio Ortega (PRD).
El perredista se dijo sorprendido por lo que llamó “lloriqueos” de la mayoría por su incapacidad para responder “a la minoría que actuó con habilidad e iniciativa”, ante la intención de incorporar recursos de enfermedades catastróficas en el catálogo de fideicomisos extintos, y con lo cual se violaba el proceso legislativo.
“Ese lloriqueo y las quejas solo disfrazan un puritanismo político, hipócrita, falso que deja mal parada la agilidad de la mayoría y la comprensión de prácticas parlamentarias que, en el mundo, están instaladas”, expuso.
Defendió la utilización de estas prácticas, que dijo son necesarias para frenar los abusos y las sinrazones de quienes pretenden lesionar los derechos de las minorías en el Parlamento.
“Las y los diputados de Morena se asombran de que ‘la minoría’ haya tomado la Tribuna; pero ¿cuántos de ellos no lo hicieron? Recordemos sus muchos intentos por aplicar estas tácticas dilatorias parlamentarias para impedir los abusos de la mayoría y que sus propuestas pudieran ser propicias para abrir la negociación y la búsqueda de acuerdos.
“Habría que recordar que la Reforma Energética del “Pacto por México”, duró 47 horas seguidas sin descanso ni tregua con la Tribuna tomada. La toma de la tribuna cuando Calderón asumió la Presidencia. ¿Cuántos días duró, acompañada de la toma del Zócalo y de Reforma?”, cuestionó.
La toma de la Tribuna del martes derivó en algunos golpes y empujones entre los legisladores, y Ortega fue uno de los diputados que terminó en el suelo luego de recibir un rodillazo del diputado Roberto Domínguez Rodríguez (Morena), razón por la cual el PRD dirigió una queja al Comité de Ética de la Cámara baja.
El perredista mencionó que Morena y sus aliados “no aceptan, ni entienden que, en todo el mundo, los Parlamentos han venido construyendo y usando instrumentos para la obstrucción parlamentaria de las mayorías, y que persiguen detener los abusos de la mayoría parlamentaria sin generar actos ilegales ni mucho menos, impedir el desarrollo de las sesiones en el Parlamento”.
Añadió que se han generado prácticas que se han instalado como “comunes” y que los morenistas deberían aceptar que son normales, legales y que, políticamente, en todo el mundo se han instalado.
Entre ellas recordó el que en Estados Unidos hay un momento denominado “filibusterismo” donde el orador habla por largo tiempo para prolongar la sesión e impedir un acuerdo de la mayoría.
De hecho, comentó, existe el récord de un personaje que duró hablando 17 horas continuas sin bajarse de la tribuna.
“La multiplicación de mociones, de reservas, las peticiones reiteradas de rectificación de quórum e, incluso, las “tomas” de Tribuna, son medidas absolutamente justificadas políticamente. Son tácticas dilatorias frente a los abusos de la mayoría”, pero éstas no deben llevar a la violencia y la agresión, acotó.
fahl