Cuando Guillaume Benoliel se sienta en el taburete del piano para ensayar la Polka Italiana de Rachmaninoff para un próximo concierto, sus pies cuelgan en el aire.
“He conocido gente talentosa en mi carrera, pero no como él”, dijo el maestro de Benoliel, Serguei Kouznetsov.
Guillaume tiene seis años. Sus padres, Claire y Dominique -ambos músicos aficionados- lo enviaron a tomar su primera clase de piano a los 4 años después de darse cuenta de que podía escuchar una melodía y reproducirla solo. También tiene un oído absoluto.
A finales de agosto, Benoliel tuvo su momento de fama en Salsburgo, la ciudad austríaca y lugar de nacimiento del compositor Wolfgang Amadeus Mozart. Benoliel fue elegido para tocar en el escenario en un concierto después de ganar dos premios en la competencia Grand Prize Virtuoso.
Obtuvo el primer premio en la categoría de jóvenes músicos y un premio especial en la de jóvenes talentos excepcionales.
Lejos de las salas de concierto, la música es simplemente una experiencia divertida que comparte con su familia. A veces tocan juntos y por las noches Benoliel da mini conciertos para sus padres en la sala de estar de su casa del sureste de París.
“Todos los días están llenos de aventuras y placer porque ambos amamos la música”, dijo su madre Claire, quien trabaja en consultoría de administración.
En cuanto a su futura carrera, Claire contó que ella y su pareja dejarán que su hijo decida. Pero dijo que sea cual sea el camino que tome, espera que la música sea parte de su vida.
ica