Este lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer su intención de proponer a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que los países que colonizaron otras naciones y tomaron piezas históricas las devuelvan.
“En el extranjero hay piezas, códices que demuestran la grandeza cultural de México, por eso fue Beatriz (su esposa) a Francia, fue a Italia, Austria. Hablé por teléfono con el presidente de Alemania (Frank-Walter Steinmeier) y estamos haciendo gestiones con el Instituto Nacional de Antropología y con la Secretaría de Relaciones Exteriores para ver qué podemos traer, qué podemos exhibir en México, que nuestro pueblo conozca piezas que se llevaron y son desconocidas, estamos haciendo ese esfuerzo”, indicó.
Sin embargo, la iniciativa del mandatario mexicano no sería la primera vez que se plantea ante el organismo internacional.
En 1995, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) pidió el desarrollo de un convenio para que los bienes culturales robados o exportados ilícitamente fueran regresados.
Sin embargo, México no puede hacer uso de ese mecanismo porque no está adherido al convenio de 1995 de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (Unesco) y el Instituto Internacional para la Unificación del Derecho Privado (Unidroit) sobre los bienes culturales robados o exportados ilícitamente
“Las naciones que tienen estas piezas no quieren devolverlas, yo estoy pensando seriamente que presentemos una iniciativa en la ONU”, señaló en su conferencia matutina.
Mediante el convenio, los organismos de la ONU son mediadores entre las naciones que reclaman bienes y las que los resguardan
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En este Convenio, los Estados se centran en un tratamiento uniforme en cuanto a la restitución de objetos culturales robados o ilícitamente exportados y permite que se proceda con las demandas directamente a través de tribunales nacionales.
Además, concierne todos los bienes culturales, no sólo aquellos inventariados, y declara que todo bien cultural robado debe ser restituido.
fahl