La filtración de un audio en la salida del vestidor del Real Madrid en su visita al Borussia Monchengladbach cuando perdían uno a cero entre Benzema y Mendy sobre Vinicius, ha dejado la puerta abierta a una gran polémica sobre la intimidad de un vestidor.

En dicho audio el delantero habla con el lateral izquierdo para decirle que no le dé la pelota a su extremo-volante de ese mismo sector, porque está jugando en contra del equipo, la platica surge cuando van a regresar a la cancha, luego que ya se habló en el vestidor y al parecer no se tocó ahí el tema.

En lo particular el tema no me espanta, vamos, no me parece algo que suceda poco, tampoco me parece falta de compañerismo, ni falta de respeto, creo que en la calentura del partido y con el estrés que se tiene, se dicen muchas cosas entre los jugadores de un mismo plantel. 

Claro que lo mejor es hablar fuerte y de frente, no sabemos si Benzema lo hizo en el vestidor, el francés entendía que Vinicius no estaba del todo bien y que Mendy al jugar por ese carril era muy frecuente que se pasara el balón entre ellos y ante tantas pérdidas de esférico, era mejor no buscar esa salida ofensiva. 

Es tan normal que se digan cosas así o más subidas de tono, que muchas veces en los medios tiempos o finales de partido o en entrenamientos las cosas lleguen a los empujones y hasta los golpes. 

De detalles como estos surgen las frases futboleras de que el vestidor es sagrado, que lo que ahí se dice, ahí se queda, o que hay códigos no escritos de la forma en que se habla y que no debe de llegar a los medios de comunicación y por eso no se permiten la entrada de cámaras, micrófonos o reporteros a estas zonas tan privadas. 

Quiero citar al buen Ramón Raya, exfutbolista profesional mexicano y director técnico, que en Twitter señalaba que quien se espantan con esos diálogos, o no jugaron ni en cascaritas o no les pasaban el balón ironizando el hecho.

No creo que esto cambié el ambiente en el vestidor del Real Madrid, un vestuario muy pesado, con jugadores de carácter, de peso, donde al ser público este diálogo vendrá el técnico Zidane para hablar del punto, donde Sergio Ramos entrará y tomará el toro por los cuernos y lejos de dividir, deberá fortalecer. 

Lo más fuerte sin duda será para Vinicius Jr, el joven criticado, y esto lo debe de fortalecer, es el momento de mostrar carácter, seguro el grupo lo apoyará y casi puedo imaginar la imagen en su próximo gol, o en su próxima asistencia a Benzema terminando en el abrazo entre los dos diciéndole al mundo del futbol que no hay problemas entre ellos. 

Y es que lo ideal sería una gran relación entre todo el grupo, pero como dicen muchos directores técnicos, no quiero que sean amigos, pero dentro del terreno de juego vean por el equipo. 

Al parecer Benzema en su calentura no fue solidario con su compañero, eso esta claro, pero tampoco quiere decir que lo quiere borrar, que no lo soporta más. 

Hay muchas historias de jugadores del mismo equipo, que no se hablaban, que se caían mal, que incluso si podían no se pasaban el balón, es ahí cuando el técnico tiene que aparecer, juntarlos y hacer que en la cancha solo tengan una sola idea, el bien del grupo. 

Por cierto amigo lector, a usted le gustaría saber todo lo que ocurre en un vestidor o escuchar todo lo que se dice, o es de la idea de respetar la intimidad de ese lugar tan privado de los futbolistas.

 

                                                                                                      @raulsarmiento