Las esperanzas de los inversores de contar con una lectura anticipada más decisiva de la elección presidencial en EEUU se vieron mermadas después de que los resultados iniciales de la votación mostraran que la carrera por la Casa Blanca está reñida, con señales de que algunos operadores estaban deshaciendo las apuestas por una amplia victoria demócrata.
El presidente republicano Donald Trump lideraba por poco a su rival demócrata Joe Biden en el vital estado de Florida, y en varios otros estados disputados que ayudarán a decidir la elección.
Pero Fox News proyectó que Biden ganaría en Arizona, abriendo la puerta a una potencial victoria en los estados de la “muralla azul” del Medio Oeste.
“En este momento, las primeras indicaciones son que esto está más ajustado de lo esperado y puede que no tengamos claridad al final de esta noche”, dijo Keith Lerner, estratega jefe de mercado de Truist/SunTrust Advisory en Atlanta.
Los futuros sobre los índices bursátiles estadounidenses subían en un entorno volátil a medida que se iban conociendo los resultados, con los futuros del Nasdaq subiendo de manera especialmente pronunciada.
El dólar estadounidense se fortalecía y el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años se reducía.
Las probabilidades del mercado de apuestas cambiaron a favor de una victoria de Trump sobre Biden, según datos de dos agregadores.
Los resultados de la elección se sentirán en todo tipo de activos, ya que tienen un amplio impacto en la fiscalidad, el gasto público, el comercio y la regulación de una serie de industrias.
Además de la presidencia, el control del Senado de EE.UU. estaba potencialmente en juego en la votación del martes, con los demócratas esperando arrebatar el poder a los republicanos.
El senador republicano Cory Gardner fue derrotado en Colorado, dando a los demócratas su primera victoria en una docena de escaños muy disputados en el Senado y ahora en manos de los republicanos. Pero algunos inversores vieron disminuir las posibilidades de los demócratas de obtener una gran victoria en el Senado.
En las últimas semanas los mercados se han obsesionado con las perspectivas de un programa de alivio fiscal masivo para ayudar a la economía a recuperarse de la pandemia de coronavirus que ha matado a más de 230.000 estadounidenses.
Una “Ola Azul” que concediera la victoria a Biden y la conquista demócrata del Senado se ha considerado como el camino más seguro hacia un paquete fiscal masivo que podría apoyar a las acciones y acentuar las tendencias de un dólar más débil y una curva de rendimiento más pronunciada.
Algunos inversionistas han considerado una victoria de Trump, que quitaría de encima de la mesa las alzas de impuestos favorecidas por Biden, como el mejor escenario para el mercado de valores. Antes de la elección, JPMorgan predijo una victoria “ordenada” de Trump como el resultado más favorable para las acciones.
Desde la elección de Trump en 2016, que introdujo recortes en el impuesto de sociedades que apoyaron a las acciones pero también impuso aranceles comerciales que llevaron a la volatilidad, el mercado de valores estadounidenses ha ganado más del 57% y alcanzado nuevos máximos.
Los inversores han dicho que cualquier resultado que denote un claro vencedor -independientemente de quién gane- podría estabilizar los mercados, mientras que lo contrario, un recuento demasiado reñido como para demorarse durante días o incluso semanas, sería ampliamente negativo para los mercados.
“Ese es mi mayor temor, que el día de la inauguración no tengamos un presidente”, dijo David Tawil, presidente de Maglan Capital en Nueva York. “La única cosa por la que todos los inversores rezan es que en un corto período de tiempo haya un ganador indiscutible porque cualquier otra cosa (que no sea eso) sería catastrófica”.
aarl