Un grupo de astrónomos descubrieron que el agujero negro supermasivos en el centro de la Vía Láctea no se mueve como se creía.
De acuerdo con una nueva investigación, el agujero negro superlativo no gira mucho, lo que proporciona más evidencia de que es poco probable que exista un chorro.
Los agujeros negros supermasivos como Sgr A*, que se encuentra en el centro de la Vía Láctea se caracteriza por: masa y giro. Además, tienen una influencia decisiva en la formación y evolución de las galaxias.
Científicos del Centro de Astrofísica de Harvard y Smithsonian y el Centro de Exploración e Investigación Interdisciplinaria en Astrofísica realizaron la investigación y fue publicada en el Astrophysical Journal Letters.
“Los agujeros negros liberan una enorme cantidad de energía que elimina el gas de las galaxias y, por lo tanto, da forma a su historia de formación estelar”, comentó el Dr. Avi Loeb profesor de ciencia de Harvard.
Los agujeros negros tienen un impacto crítico en su galaxia anfitriona por lo que medir los efectos de su giro es difícil.
Loeb y el Dr. Giacomo Frazione de CIERA utilizaron las órbitas estelares y la distribución espacial de las estrellas S, las más cercanas que órbita Sgr A* y que viajan a una gran velocidad.
“Hemos llegado a la conclusión de que el agujero negro supermasivo en el centro de nuestra galaxia gira lentamente. Esto puede tener un impacto significativo en la detectabilidad de la actividad en el centro de nuestra galaxia y en futuras observaciones del Telescopio del Horizonte de Sucesos (EHT por sus siglas en inglés)”, Fragione.
Las estrellas S parecen estar divididas en dos planos comunes, gracias a ello, Loeb y Fragione demostraron que si Sgr A* tuviera un giro significativo, los planos orbitales de las estrellas al nacer estarían desalineaos.
“Para nuestro estudio usamos las estrellas S recientemente descubiertas para mostrar que el giro del agujero negro Sgr A * debe ser menor al 10% de su valor máximo, que corresponde a una luz negra que gira a la velocidad de la luz en planos orbitales comunes. De estos planos orbitales comunes, las estrellas no permanecerían alineadas en ellos durante su vida, como se puede ver hoy en día,”, comentó Loeb.
“Se cree que los chorros funcionan con agujeros negros giratorios que actúan como volantes gigantes”, dijo Loeb. Fragione agregó: “De hecho, no hay evidencia de actividad de chorro en Sgr A *. El próximo análisis de datos del EHT arrojará más luz sobre este tema.”
ica