Con las sirenas prendidas, una tras otra las ambulancias arriban a la zona de Triage del Hospital General de México, ubicado en la alcaldía Cuauhtémoc; de ellas, respirando con dificultad y con los rostros marcados por la preocupación, descienden personas contagiadas de Covid-19 y sus familiares.
De una de las ambulancias desciende una señora de aproximadamente 50 años, cuyo pecho se agita rápidamente; aunque cuenta con un tanque de oxígeno, se nota su dificultad para respirar.
Pese al cubrebocas, a su acompañante se le nota el rostro preocupado y sus manos, inquietas, agitan más de una decena de papeles antes de ingresar al hospital.
Del nosocomio salen médicos con trajes protectores para atender a la señora, a quien, de entrada, revisan con un estetoscopio. en cambio, los paramédicos que la trajeron están protegidos sólo con cubrebocas.
Al terminar el primer contacto, los médicos la cambian de camilla y la ingresan al hospital. Los paramédicos, en cambio, únicamente se aplican un spray, un desinfectante.
Christian Rodríguez, trabajador de la ambulancia privada, mencionó que al día realizan hasta nueve traslados de pacientes Covid, y detalló que al dejar a los enfermos regresan a su base para quitarse la ropa y desinfectar la unidad para continuar trabajando.
“Ha subido mucho el traslado otra vez, estábamos trasladando a tres o cuatro al día, ahora son hasta nueve los que hacemos en un solo día, de lunes a domingo (a diferentes hospitales)”, mencionó.
Apenas 20 minutos después llega al hospital una mujer de 30 años, caminando, pero sosteniéndose de los barrotes con una mano y tomándose el pecho con la otra. Su pecho sube y baja agitadamente, respirando con rapidez.
Al entrar le piden firmar papeles; a su acompañante, un hombre, se le ve inquieto y angustiado.
La agente de Policía que vigila la zona de acceso de Triage, quien omitió su nombre, comenta que los ingresos por Covid-19 han aumentado considerablemente, pues en semanas pasadas se habían reducido a dos o tres diarios, pero ahora la cifra subió a cerca de seis al día.
Mientras, se ve pasar a una pareja con una mujer de la tercera edad en silla de ruedas, quien va con su cabeza recostada en su hombro y cubrebocas puesto, dirigiéndose también a la zona de Triage.
A tan solo seis calles de distancia del hospital se encuentra el Instituto de Ciencias Forenses y el Servicio Médico Forense… donde los servicios fúnebres también ofertan sus servicios.
José Antonio de Jesús, trabajador de la funeraria Lascano, coincidió en que los traslados, pero de fallecidos por Covid-19, se habían reducido de uno a dos al día, pero en el último mes realizan cerca de siete diarios.
“La situación ya estaba bajando, pero a la gente le valió, empezó a salir y ve ahora hacemos promedio en el día siete traslados”, indicó.
LEG