El senador del PAN y aspirante al gobierno de Chihuahua, Gustavo Madero, consideró que la denuncia interpuesta por su compañera senadora de Morena, Mónica Fernández, por presunta violencia de género ante la Fiscalía General de la República, obedece a una estrategia electoral.
“Obviamente es una estrategia de tipo electoral, no tiene mayor fondo, fue a todas luces un tema que fue proyectado en vivo y en directo, todo mundo fue testigo, que más bien la víctima fui yo”, advirtió.
La senadora y ex presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández, lo acusó de evitar llevar a cabo sus funciones a través de agresiones, durante la sesión en la que fue electa como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Rosario Piedra Ibarra.
Al respecto, el panista chihuahuense, refirió que “cuando uno ya está en campañas, pues surgen muchos recursos sin sustento, pero tratan de generar impactos para ser capitalizados, porque en Chihuahua estamos muy fuertes, donde Morena está más débil, de todo el país, donde menos quieren a Morena es en el estado de Chihuahua”.
Incluso vislumbró “una trampa por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el polarizar la elección a través de la gente que está con Morena y todos los que estamos en contra, pero desprestigiando a la oposición como una oposición sin principios, sin doctrina y con intereses obscuros, eso es lo que quisiera Andrés Manuel mostrar, y en ese sentido hay que ser muy cautelosos”, alertó.
MGL