Por: Itan Cervantes y Fernando Hernández
La música no para ante el virus. La crisis provocada por la pandemia de Covid-19 afectó a los diversos sectores de México y el mundo. Uno de ellos es el del entretenimiento, que por las medidas para evitar contagios, tuvo que pausar sus actividades, lo que implicó la cancelación de eventos, conciertos, convenciones y más.
Un ejemplo, es el caso de la Orquesta Sinfónica de Zapopan, que desde el arranque de la cuarentena en el país, el pasado 23 de marzo, ha visto transformada su realidad.
El director de la Orquesta, Allen Vladimir Gómez, contó en entrevista para 24 Horas cómo la agrupación ha trabajado en los últimos meses, en medio de la pandemia.
“Nos ha pegado mucho y nos ha llevado a no poder hacer eventos. Si somos 20, 40 miembros, y te dicen que hay que estar cinco, se complica. Pero de lo malo hemos tratado de sacar lo bueno”, explicó.
Nuevos caminos para la orquesta
El maestro Allen Vladimir Gómez comentó que los trabajos no han parado, pese a las restricciones que hay no sólo en su municipio, sino a lo largo del país, pues han tratado de organizar colaboraciones con otras orquestas, músicos e incursionar en otro tipo de música.
La Orquesta Sinfónica de Zapopan tiene por delante un intenso programa de actividades, que inició desde el 8 de noviembre y contempla finalizar el próximo mes de marzo; las que se adaptan a una nueva cotidianidad, al llevarse a cabo a la distancia.
El director explicó que han buscado un mecanismo para convertir la distancia de un problema a una ventaja; al no sólo tratarla como alejarse de las audiencias, sino también acercarse en otros puntos.
“Por la pandemia, si antes nos veían mil personas en un teatro, ahora nos pueden ver cien mil, va cambiando el prototipo de música y es algo con lo que tenemos que vivir y esto que hemos aprendido”, dijo Allen Vladimir.
En Jalisco las cosas no son tan distintas
Un caso más es el de la Orquesta Filarmónica de Jalisco, la cual ha pasado por momentos difíciles por la pandemia y el tiempo perdido. El director Jesús Medina contó a 24 HORAS que han sido alrededor de cinco meses perdidos.
“Se mandaban videos de músicos de la orquesta a las redes sociales para mantener alguna actividad pero, en general, como músicos extrañamos el escenario porque es como nuestro hogar”, precisó.
Uno de los experimentos que realizó la Filarmónica de Jalisco reunió grabaciones tomadas con los celulares de sus integrantes, las cuales fueron mandadas a un estudio para ser editadas.
Medina reconoció que siempre hace falta el público cuando tocan, porque es una acción que realizan para alguien más, y que les llena de satisfacción, “para eso nacimos”.
El próximo 29 de noviembre, Medina colaborará con la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, en un programa que incluye la Serenata para Cuerdas y Timbales KV 239 de Mozart, y que será transmitido en las cuentas del Instituto de Cultura estatal.
FRASE
“Siempre el público es parte de un concierto. Se logra un todo y una comunicación entre la orquesta, el director y el público; todos nos envolvemos en la belleza de la música”, músicos de la Orquesta Filarmónica de Jalisco.
LEG