El nacimiento de Molly Gibson es algo fuera de lo normal, ya que a pesar de tener tan sólo un mes de edad, ella pudo haber nacido en cualquier momento de los últimos 27 años. El embrión de la bebé fue congelado en octubre de 1992 y permaneció así hasta comienzos de este años, cuando Tina y Ben Gibson de Tennessee la adoptaron.
Tina dio a luz a Molly a finales de octubre, según reporta CNN. Se piensa que el nacimiento de la bebé estableció un nuevo récord, uno que anteriormente tenía su hermana mayor, Emma, para el embrión que estuvo congelado por más tiempo.
“Con Emma, estábamos tan enamorados de tener un bebé”, dijo Tina Gibson a CNN el martes. “Con Molly, somos de la misma manera. Es un poco gracioso, aquí vamos de nuevo con otro récord mundial”.
Y es que Gibson quedó embarazada de Emma y de Molly con la ayuda del Centro Nacional de Donación de Embriones una organización religiosa ubicada en Knoxvile que almacena embriones congelados que los pacientes de fertilización in vitro han decidido no usar.
Las familias pueden adoptar esos embriones que no se usaron, estos se transfieren al útero de una madre adoptiva. Emma había roto el récord anterior del embrión congelado con más tiempo en 2017 según el centro.