El Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) se ha convertido en la gran terapia intensiva de México; sin embargo, ante el incremento de contagios en la Zona Metropolitana del Valle de México, su capacidad se ha visto rebasada.
“Hoy todas las camas están ocupadas; es complicado tenerles que ayudar a derivar a otros lados, porque aquí ya no tenemos espacio para atenderlos”, señaló el doctor Jorge Salas, director general del instituto.
Explicó que ante la gravedad de los enfermos que atienden, “nos hemos convertido en la gran terapia intensiva”, pues de las 160 camas ocupadas, 105 son pacientes que se encuentran intubados.
Al participar en el foro sobre “Experiencias y retos del abordaje del Covid-19 en unidades del Sistema Nacional de Salud” –organizado por la Comisión de Salud del Senado– el doctor Salas explicó que el criterio de ingreso de pacientes al INER es que tengan una grave insuficiencia respiratoria, “todos tienen neumonía”, ante lo cual su tasa de mortalidad es de 35% “muy alta, comparada con otras enfermedades”, reconoció.
Refirió que el mayor desafío en este momento es brindar la mayor cobertura posible por lo casos graves de inminente intubación, y la alta demanda de hospitalización.
Por la noche, en conferencia, la Secretaría de Salud negó que la ocupación hospitalaria en la Ciudad de México se encuentre al 100%.
“Hay unidades médicas que pueden estar llegando a un punto de saturación. Hay unidades que todavía tienen disponibilidad para atención general y para pacientes graves que requieren ventilación”, refirió el director general de Epidemiología, José Luis Alomía, y destacó que a través de la reconversión, la disponibilidad de camas está creciendo todos los días.
Pero, evitó dar a conocer la escala de hospitalización que tuvo la capital del país ayer lunes. De acuerdo al corte hospitalario del 13 de diciembre, la ocupación de camas generales en la CDMX estaba en 83%, y la de camas para pacientes graves que requieren ventilador era de 71%, rebasando en ambos casos el nivel de seguridad planteado por las propias autoridades.
Informó que se está contratando a todo el personal que se requiera para la atención de pacientes e incluso se está apoyando con personal de salud de otras entidades. Y destacó que los centros reguladores de urgencias médicas como 911 y Locatel están identificando la capacidad hospitalaria para trasladar al paciente, lo que evitará llegar a hospitales saturados.
Buscan tratamiento
Mientras tanto, el director general del Instituto Nacional de Nutrición “Salvador Zubirán”, David Kershenobich, señaló que a pesar de la vacuna contra Covid-19, es necesario encontrar tratamientos efectivos que permitan disminuir la mortalidad y las complicaciones en los pacientes.
“Independientemente de las vacunas, se requieren tratamientos tempranos de la infección viral”, por lo que la meta es evitar que los enfermos pasen de un estado leve al uso de un ventilador, sobre todo ante la saturación de hospitales que se está registrando en estos momentos en el país.
Informó que en su instituto existen más de 80 trabajos de investigación de los cuales más de 15 son protocolos que están explorando nuevos tratamientos.
Cecilia Acuña, en representación de la Organización Panamericana de la Salud, reconoció que el reto en México será mantener la capacidad para dar respuesta a las necesidades de salud.
LEG