Cáncer
Foto: Pixabay Tras el resultado, Milner se ha sometido a quimioterapias, aunque su esperanza de vida apenas alcanza los dos años  

Una mujer británica de 30 años de nombre Sarah Milner, se negó a practicarse un aborto pese a que fue diagnosticada con cáncer, ahora su pronóstico de vida apenas alcanza los dos años.

Madre de tres hijos, Milner, decidió sacrificar su salud para poder continuar con el embarazo de su cuarto hijo, esto después de ser diagnosticada con una forma agresiva de cáncer en el cuello uterino a las 21 semanas de embarazo.

Pese a la recomendación de los médicos de interrumpir el embarazo para recibir quimioterapias, la mujer decidió continuar con el proceso de gestación hasta que dio a luz a su bebé el pasado primero de abril, mismo que nació saludable.

“Debido a la naturaleza agresiva del cáncer, los médicos me aconsejaron interrumpir mi embarazo. Sin embargo, realmente no quería hacer eso, quería tener a mi bebé sin importar nada”, aseguró Milner.

Tras el alumbramiento, Sarah se sometió a una histerectomía y una extirpación de ganglios linfáticos, esto para tratar de combatir el cáncer.

En primera instancia, parecía que la decisión había sido correcta, pues pudo tener a su bebé y atacar a la enfermedad.

“Después de dar a luz me dijeron que eran buenas noticias, que habían extirpado la mayor parte del cáncer y tenía muchas posibilidades de que me dieran el visto bueno […] Pensé que mi decisión había dado sus frutos y que todo iba a salir bien”, reconoció Milner.

El pasado mes de noviembre después de que la mujer recibiera los resultado de una tomografía realizada en octubre, se encontró otro bulto en el canal linfático y el cáncer se había extendido por más partes de su cuerpo.

“No podía creer lo que me estaban diciendo. Mi mundo se vino abajo por completo. La noticia me aplastó. Sabía los riesgos que estaba tomando, pero simplemente no era lo que esperaba ver”, dijo Sarah.

Tras el resultado, Milner se ha sometido a quimioterapias, aunque su esperanza de vida apenas alcanza los dos años, la mujer reconoce que podría ser menos por el nivel tan agresivo del cáncer.

“Estoy feliz de que logramos casarnos, fue una de las cosas más importantes para mí”, reconoció Milner, quién asegura que buscará dejarle cosas especiales a sus hijos Lily, Grace, Bobbie y Louis, antes de fallecer.

 

 

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