La capital de Estados Unidos continuó reforzando su seguridad el viernes, cerrando el acceso a lugares históricos y estableciendo puntos de control vehicular en un perímetro de seguridad que rodea el centro de Washington antes de que el 20 de enero tome posesión el presidente electo Joe Biden.
Las ceremonias de investidura presidencial son siempre eventos muy seguros con operaciones dirigidas por el Servicio Secreto de Estados Unidos, pero las medidas de este año se han ampliado después de que partidarios del presidente Donald Trump irrumpieron en el Capitolio el 6 de enero, en un intento de evitar la certificación final de la victoria de Biden.
Agentes policiales han advertido de amenazas y grupos armados en los 50 estados.
El Servicio Nacional de Parques anunció que la explanada y los monumentos de la ciudad estarán cerrados para los visitantes al menos hasta el 21 de enero.
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Dentro de la explanada hay monumentos icónicos como los memoriales de Lincoln y de Jefferson, así como el de Washington. La zona en torno a la Casa Blanca fue cerrada también, al igual que un puente clave sobre el río Potomac que conecta a Virginia con Washington, además de los parques Este y Oeste del Potomac, incluido Hains Point.
“No podemos permitir que se repita el caos y las actividades ilegales que Estados Unidos y el mundo presenciaron la semana pasada”, dijo a periodistas Matthew Miller, jefe de la oficina del Servicio Secreto en Washington.
Ken Cuccinelli, el subsecretario en funciones del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, dijo a CNN que el equipo de Biden había decidido retrasar un día el ensayo de la ceremonia debido a “algunos comentarios en línea sobre el domingo 17″.
Aún así, el jefe de gabinete de Biden, Ron Klain, dijo en una entrevista con el Washington Post que confiaba en que los agentes de la ley serían capaces de asegurar la toma de posesión.
Un funcionario estadounidense dijo que se espera que el número de tropas de la Guardia Nacional aumente a 25 mil en Washington. Se espera que al menos 10 mil estén en Washington para el sábado.
EFVE