La estadística no miente. En el caso de México, ha demostrado insistentemente que la estrategia adoptada por las autoridades sanitarias para combatir la propagación del coronavirus SARS-CoV-2 no ha sido certera. Es el caso del llamado Ranking de Resiliencia, elaborado por el medio financiero Bloomberg, que nos ubica en el último lugar de una tabla en la que es evaluado el desempeño de 53 naciones.

Dado a conocer el pasado lunes, dicho estudio comparativo realizado entre las economías globales que deberían estar mejor preparadas para hacer frente a la pandemia señala que México es el país con la mayor tasa de mortalidad y el índice más grande en materia de positividad en pruebas aplicadas.

Bloomberg otorga a México una calificación de 30.8, en una escala que va de 1 a 100, siendo Nueva Zelanda el país al que se le asigna la mejor nota, como resultado de las medidas adoptadas que han permitido la casi erradicación del coronavirus en aquella isla del Pacífico.

Para alcanzar sus conclusiones, los analistas han tomado como base el creciente número de contagios y hospitalizaciones en México, así como el acelerado ritmo con el que ha crecido la cifra de muertos por Covid-19, que rebasó hace ya tiempo la barrera de 60 mil defunciones, que el propio Gobierno ubicó como el umbral con el que se alcanzaría una situación de emergencia. Al ritmo que vamos, en pocas semanas este parámetro habrá de ser triplicado.

El recién publicado libro Un daño irreparable (editorial Planeta), de la académica Laurie Ann Ximénez-Fyvie, una de las obras más críticas sobre la estrategia mexicana contra el Covid-19, hace un detallado recuento de las decisiones, que el estudio considera erróneas, adoptadas por la autoridad sanitaria y que explican resultados como el publicado por Bloomberg.

La jefa del laboratorio de Genética Molecular de la UNAM y Doctora en Ciencias Médicas por la Universidad de Harvard estima que las decisiones tomadas por el equipo que encabeza el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, han sido tardías y poco transparentes. Advierte que nuestro país falló en la detección oportuna a través de pruebas, con un impacto directo en la estimación del comportamiento de la pandemia.

A ello se agrega una comunicación politizada y contradictoria, particularmente en temas tan básicos como el uso del cubrebocas, que ha sido, según indica la autora, perjudicial en el manejo de esta crisis sanitaria.

Muchas han sido las publicaciones que pueden calificarse como serias y elaboradas por profesionales del ramo que señalan un fracaso en la estrategia sanitaria del Gobierno. Se trata de un tema que atiza la confrontación interna previa a las elecciones del próximo mes de junio y que tendrá a la pandemia como factor en la decisión de los votantes.

Segundo tercio. Se mejoran las perspectivas para el crecimiento económico en 2021. El FMI prevé que México registrará un incremento de su actividad en un 4.3%, impulsado por un mejor desempeño de su principal socio comercial, Estados Unidos.

Tercer tercio. En el ocaso de su mandato, el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, no deja de sorprender con sus ocurrencias. Ahora pretende expropiar al Club Campestre de Tijuana por la necesidad de “parques y pulmones”. A los empresarios de aquel estado les urge que concluya este mandato, el peor en la historia de aquella entidad, según nos comentan.

@EdelRio70