Sisal es una comisaría del municipio de Hunucmá en Yucatán es una aldea de pescadores de poco más de 2 mil habitantes rodeada de una naturaleza impactante mente prodigiosa; Maní posee siglos y siglos de historia maya, gastronomía y una destacada apicultura herencia de sus ancestros.
Por Sisal pasaron toneladas de henequén “el oro verde” hacia otros puertos de México y el mundo, eso dio a Yucatán su esplendor los siglos siglos XVIII y XIX, desde este puerto se exportaba la fibra henequenera, el palo de tinte, la sal y otros enseres.
Maní, es una antigua población habitada desde el post clásico maya entre los siglos VIII y X, con la llegada de los españoles se estableció un monasterio franciscano que se construyó hacia 1549. El edificio fue construido con las piedras de los edificios mayas precolombinos. O sea que la historia de este pueblo vive en cada rincón.
Sisal, un antiguo puerto maya poseedor de hechos históricos como la visita de la emperatriz Carlota de Habsburgo en 1865, donde aún se conserva la casa en la que pernoctó. Rodeado de abundante naturaleza, Sisal promete convertirse en un importante polo turístico, hoy en día ya se realizan recorridos por las zonas de mangle y humedales que dejan boquiabierto a cualquiera. Su riviera náutica posee un mar de colores espectaculares que cambia de tonalidad conforme las temporadas del año.
También existen cascos hundidos de barcos piratas y navíos europeos que naufragaron y que se han convertido en paraísos del buceo y refugio de fauna marina, como pulpos manta rayas y peces multicolores. Enormes manglares de varios colores, desde el negro, marrón y café rodean el ecosistema de Sisal, frente al mar está la ría donde anidan flamencos rosados y otras especies endémicas como cocodrilos y cientos de aves.
Cerca está la laguna Azul de La Carbonera con un espectacular banco de arena, los recorridos en lancha también te llevan a conocer los petenes, que son islotes llenos de vegetación rodeados de mangle y cenotes.
A bordo de la operadora turística Ziz Ha Ecoturismo, se puede llegar hasta una ciénaga para nadar en un cenote a cielo abierto, y como colofón el pueblo posee construcciones muy antiguas y emblemáticas como su Ex Aduana, el Fuerte de Santiago y el antiguo faro.
Maní, prácticamente ubicado en centro geográfico del estado de Yucatán a tan solo 100 kilómetros al sur de Mérida, es un importante polo gastronómico, su platillo estelar es el Poc Chuc hecho a base de filete de cerdo marinado en naranja agrio y servido con cebolla morada con frijoles negros.
Destaca el Ex Convento de San Miguel Arcángel una imponente fortaleza ubicada en el centro Maní Yucatán, una obra de la arquitectura novohispana de 1,168 m2, edificada a mediados del siglo XVI serviría para evangelizar a los indígenas.
Este ex convento es el más antiguo de Yucatán construido en 1549, aquí fue donde ocurrió el 12 de julio de 1562 llevó el “Auto de Fé” La quema de los códices y símbolos mayas por el franciscano Fray Diego de Landa. Un hecho histórico sin igual.
Maní posee una muy desarrollada infraestructura apícola, en el pueblo existen más de 30 meliponarios dedicados a la crianza y explotación de la abeja maya y sus derivados. Los meliponarios se han capacitado para ofrecer al visitante una experiencia interactiva en torno a la miel de abeja melipona y eso ya es un producto turístico muy reconocido.
Otro atractivo son los “solares mayas” que consiste en una gran extensión de terreno usado para diversas actividades domésticas, como cultivos y cría de animales de traspatio. En la antigüedad los mayas solían tener en sus casas un espacio denominado “solar” para sustento de la familia con huerto y animales de granja. También ya existe una empresa turística que ofrece tours en bicicleta como medio de transporte turístico dentro del pequeño poblado de Maní.
En Maní también ya se implementó un mercadito artesanal para mostrar el arte textil, X’manikté la técnica de bordado más antigua en Yucatán. La experiencia gastronómica en Maní Yucatán te lleva a las cocineras tradiciones de la región como Doña Clotilde quien está lista para recibir a los visitantes en su cocina y enseñarles a hacer tortillas a mano y servirles deliciosos manjares.
Además hay tres restaurantes en donde se puede degustar el plato emblema del pueblo mágico: El Poc Chuc.
Ambos son ahora Pueblos Mágicos de Yucatán, Sisal y Maní, ambos declarados nuevos integrantes del programa desarrollado por la Secretaría de Turismo Federal, dicho nombramiento ocurrió el pasado 1 de diciembre en una ceremonia protocolar presidida por el secretario de turismo federal Miguel Torruco Marqués.
Mucho se ha hablado de que su nombramiento quizá fue prematuro que quizá su infraestructura turística aún no estaba lista. Quizá sí, pero lo que yo veo son enormes exponentes poseedores de una riqueza natural e histórica incalculable que les puede dar muchos beneficios acelerados si lo saben aprovechar bien.
Será labor de la actual secretaria de turismo de Yucatán Michelle Fridman Hirsch con las comunidades locales, los empresarios y autoridades de gobierno para acelerar lo que se necesite para que pronto veamos a estos dos pueblos despuntar con tanta magia que poseen.
LEG