El movimiento feminista en México cada día va tomando más fuerza, las mujeres constantemente están imponiendo su agenda, misma que se ha colocado en los medios digitales y tradicionales. Ya sea para denunciar un abuso por parte de un influencer famoso o un impuesto injustificado en productos de higiene personal, la voz de la mujer mexicana está cada vez más presente en la arena digital.
Por ello, resulta incomprensible como en el Gobierno no exista una sola persona que pueda asesorar correctamente al Presidente sobre estos temas. Ya van dos crisis que atraviesa en lo que va de su sexenio respecto al movimiento feminista y parece que el Presidente se encuentra completamente sólo, pues nadie de su equipo parece ayudarlo a atajar el tema.
La primera gran crisis de este gobierno relacionada con temas del movimiento feminista, sucedió entre el 18 y 24 de febrero del año pasado, cuando iniciaron fuertes protestas en contra de la actuación del gobierno respecto a los feminicidios en el país. En ese momento la indiferencia del Presidente, así como sus declaraciones en torno a que era un movimiento orquestado por la derecha, le significaron un 64% de negativos en la conversación digital y de acuerdo con la herramienta de medición Xpectus; además de los negativos, las críticas hacia el Ejecutivo tuvieron un alcance superior a los 200 millones de usuarios. Mientras que el colectivo y el movimiento #UnDíaSinMujeres tuvo un 63% de positivos y su mensaje alcanzó a 320 millones de usuarios.
Uno pensaría que tras este impacto en la arena digital, en el equipo de Palacio Nacional tomarían medidas por lo menos para entender y escuchar las exigencias del movimiento. Sin embargo, todo parece indicar lo contrario. Hoy ante la polémica que ha generado el respaldo del Presidente y del partido en el poder a la candidatura de Félix Salgado Macedonio, se tiene registro de un 76% de críticas hacia el Ejecutivo.
La polémica empezó dirigida hacia MORENA y su dirigente nacional, Mario Delgado, en ese momento los colectivos feministas alzaban la voz para que el Presidente las escuchara y “rompiera el pacto”. Sin embargo, tras la polémica declaración de “Ya Chole”, el mandatario hizo suyo el conflicto y hoy hay quienes lo compara con la fallida campaña de Peña Nieto “¡Ya Chole con tus quejas!”. Estas críticas han venido creciendo mientras más habla el presidente sobre el tema, ayer fue con la explicación de Beatriz sobre lo que significa romper el pacto… ¿Mañana?
Andrés Manuel López Obrador ha demostrado a lo largo de su trayectoria política ser un hombre cercano a las causas sociales y, por ende, debería de permitirse escuchar las voces de las mujeres. No sólo de las víctimas del precandidato a la gubernatura de Guerrero, también a las millones de víctimas de violencia en todo el país. Al no comprender este movimiento, mostrarse indolente y poco solidario el Presidente luce tal y como describe a sus antecesores, personajes que se negaron a entender los verdaderos reclamos sociales, como en el 68, cuando un presidente se negó a escuchar a los estudiantes, en los 90 cuando se negaron a escuchar a los indígenas o recientemente cuando se negaron a entender el reclamo de las víctimas por la violencia en el país.
Este país, tan complejo y con tantas aristas en su gobernabilidad, ciertamente necesita un liderazgo fuerte como el que es capaz de sostener el Presidente. No obstante, no necesitamos un Presidente obstinado, que se niega a escuchar a la sociedad simple y llanamente porque se encuentra en medio de un proceso electoral.
Ciertamente la oposición está aprovechando este momento y sería ingenuo pensar lo contrario. Sin embargo, detrás del caso de Salgado Macedonio, hay 3 víctimas reales, mujeres de carne y hueso que han dado su testimonio y tal vez otras más en el anonimato. Detrás de ese enojo contra Salgado Macedonio hay millones de mujeres enojadas por la inequidad, violencia e impunidad que rige en este país. Es momento de que el Presidente y su gobierno abra los ojos y escuche el reclamo, porque bien dicen: “la tercera es la vencida”.