El Presidente señaló que el aumento de asesinatos entre bandas estaría relacionado con el control del narcomenudo del cristal.
Foto: Cuartoscuro / Archivo Destacó que los casos de feminicidios deberían generar indignación y el Estado tendría que dar un mensaje claro y contundente  

A un año de la megamarcha que reunió a miles de mujeres para exigir #NiUnaMenos, las agresiones en contra de este sector se mantienen a pesar del encierro con motivo de la pandemia.

Los homicidios dolosos tuvieron un repunte de 12% al pasar de 214 en diciembre del año pasado a 240 en enero de 2021; mientras que la violencia familiar prácticamente se mantuvo de 17 mil 386 a 17 mil 392; es decir, .03% de aumento.

Ana Yeli Pérez, directora de Justicia Pro Persona y del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), dijo en una entrevista que está de acuerdo con la visión de un Gobierno que se preocupa por las causas sociales, pero no que se invisibilice la desigualdad de género.  

Advirtió que se deben atender los dos temas, de lo contrario se tendrán avances a medias, ya que la desigualdad económica y social repercute también en este sector; y enfatizó que se requieren políticas públicas de prevención.

“Si las víctimas de violencia familiar tienen buena atención y acceso a la justicia se pueden prevenir los feminicidios íntimos, que es un porcentaje relativamente menor a los feminicidios que se cometen por desconocidos”. 

Aseveró que de manera general para erradicar las agresiones se pide invertir en políticas de prevención que incidan en la educación con las nuevas generaciones para tener una medición real.

Respecto a las medidas tomadas para proteger Palacio Nacional, así como los monumentos aledaños con motivo de la marcha del Día Internacional de la Mujer, la integrante de Observatorio  externó que son congruentes con un Gobierno que no sabe dar los mensajes adecuados o las respuestas que se esperan, las cuales deberían ser de compromisos y no de negativas.

Esto luego de que el mandatario afirmó que la valla metálica no es por miedo, sino una medida de precaución para evitar provocaciones y violencia.

“El posicionamiento del Ejecutivo es fundamental; particularmente en el movimiento, vemos como un tema que, aunque está en la agenda no lo están sabiendo tratar y con los mensajes de cubrir los inmuebles se desvirtúa”.

Destacó que los casos de feminicidios deberían generar indignación y el Estado tendría que dar un mensaje claro y contundente.

“En todos los movimientos hay grupos de infiltrados, pero también hay un hartazgo legítimo que no se sabe atender y no dan la prioridad que merece”.

Testimonios

Persiste brecha laboral: Daniela

Los estereotipos y la creencia de que el hombre puede hacer lo que quiera con las mujeres son los principales motivos de la violencia contra ellas, consideró Daniela, de 24 años.

En su experiencia, la brecha de género es más representativa en el ámbito laboral, “no se valora el conocimiento u opinión de la mujer simplemente porque se cree que no va a entender las cosas o no es lo suficiente buena para aportar algo a una empresa; principalmente lideran hombres”.

Ello, contribuye a la violencia tanto psicológica como económica de la mujer, resaltó la trabajadora.  /Agustín Carteño

“Queremos ser escuchadas”

“Ser mujer en una sociedad machista representa dificultades, tristezas, miedos, muchos anhelos y confusión”, expresó Iyari, de 23 años.

La estudiante recordó que cuando era niña, luego de una pelea entre sus padres, la mujer le dijo: “Estoy muy agradecida de que seas mujer porque tú me entiendes, pero a la vez estoy muy triste por ti y tengo mucho miedo por ti”.

Ante ello, afirmó que este día se hizo porque “queremos ser escuchadas, reconocidas”, pues –destacó– la mujer no sólo sirve para hacer algo y tiene cualidades diversas. /Agustín Carteño

Apuestan por la educación

Perla Ortega, Maggie Salazar y Erika Garro coincidieron en la importancia de la educación para erradicar la violencia.

La primera de ellas, psicoterapeuta de profesión, comentó que debe evitarse la normalización de las agresiones y trabajar en la identificación de los talentos que cada mujer y ser humano tiene.

Mientras que Erika, servidora pública, destacó la importancia de reforzar los valores y el respeto hacia los otros como medida para acabar con la violencia y la desigualdad. En ese sentido, Maggie -empresaria- reiteró que la prevención comienza desde casa. / Alejandra Arce

AR