Es beneficioso hablarle a un caballo como se hace con un bebé, asegura un estudio presentado en Francia.
“Los caballos se ponen más atentos y parecen entender nuestras intenciones mejor” cuando el tono utilizado por el jinete es “más agudo” y utiliza “entonaciones exageradas”, afirma el estudio desarrollado por el Instituto nacional de investigaciones para la agricultura, la alimentación y el medio ambiente (Inrae) y el Instituto francés de equitación (IFCE).
“Jinetes y criadores deberían integrar este método en su relacionamiento con los caballos para facilitar la interacción cotidiana y mejorar el bienestar de los animales”, destaca el Inrae.
El estudio completo fue publicado por la revista científica Animal Cognition.
Para evaluar mejor el impacto de este lenguaje, los etólogos desarrollaron dos series de pruebas con veinte caballos que aún no habían estado expuestos a “conversaciones de bebé”.
“Los caballos responden más favorablemente, se muestran más tranquilos, miran más al experimentador y responden a los gestos”, señala el INRAE.
En la segunda prueba, los científicos establecieron que las consignas para obtener alimento eran mejor seguidas por los caballos si se les comunicaban en un tono infantil.
Los equipos del Inrae habían ya demostrado en otro estudio que los equinos son capaces de reconocer expresiones de un rostro humano. Por lo tanto, los caballos se ponen más nerviosos ante una expresión de cólera y más tranquilos ante una alegría.
LEG