Unas 40 denuncias ante el Ministerio Público y la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, por daños al patrimonio del municipio de Mazatlán, Sinaloa, pesan sobre el exalcalde Fernando Pucheta Sánchez y 20 ex servidores públicos municipales.
En la trama de corrupción por parte del actual candidato común a la presidencia municipal de Mazatlán por PRI, PAN y PRD, y su equipo, las denuncias son por robo, desempeño irregular de la función pública, desvío de recursos públicos, fraudes genéricos, uso indebido de documentos y quebrantamiento de sellos.
Una de las acusaciones se centra en la comisión de faltas administrativas graves por el desvío de recursos públicos y abuso de funciones en contra del patrimonio del ayuntamiento, por la compra de un terreno de 15 hectáreas en el ejido Palmillas, con la finalidad de utilizarlo como cementerio.
A pesar del conocimiento de las autoridades de que el terreno se clasificaba como zona no urbanizable y no presentaba características aptas para facilitar las actividades de construcción de tumbas, el ayuntamiento a cargo de Pucheta Sánchez erogó 22 millones y medio de pesos, más impuestos, para adquirirlo.
Primero se compró el terreno y casi al término de dicha administración, se solicitó el trámite al Gobierno del estado para utilizarlo como cementerio.
Después se otorgó la obra a la empresa Carreteras y Obras del Pacífico (contrato MM-DOP-CONPU2018-01) por 12.1 millones de pesos, a pesar de que se debió descalificar al licitante que resultó ganador por no presentar el avalúo, los estudios y los permisos necesarios para concursar.
Incluso recibió, por parte del ayuntamiento, un anticipo por 4.2 millones de pesos, los cuales nunca fueron devueltos.
LEG