La presunta negación de derechos laborales en la planta de General Motors (GM) en Silao, Guanajuato, podría desembocar en multas a esta planta o incrementos arancelarios a sus productos.
Lo anterior se decidirá tras la revisión de las condiciones laborales de los trabajadores, sobre su derecho a representación sindical, bajo el esquema del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Y es que México cuenta con 55 días para verificar esta primera solicitud con la empresa involucrada, que es General Motors, para revisar si hay o no una denegación de derechos.
En caso de que México encuentre que sí se vieron afectados dichos derechos, el Gobierno mexicano podrá solucionar el asunto directamente con GM a través del marco normativo vigente e informarle a EU de qué forma lidió con el asunto. En caso de que EU acepte la negociación, el tema quedaría hasta ahí. Sin embargo, en el supuesto de que EU no esté de acuerdo o en caso de que México analice el caso y no encuentre violación de derechos, EU puede iniciar un panel bajo el Mecanismo de Respuesta Rápida del T-MEC.
Al llevarse la disputa a esta instancia, esto implicaría verificaciones a la empresa, revisión documental, entrevistas con los encargados de tomar las decisiones sindicales y en aproximadamente cuatro meses, que es el tiempo contemplado mediante dicho mecanismo, se tomaría una decisión.
En caso de que la decisión sea favorable a la demanda de Estados Unidos, se daría la posibilidad de interponer sanciones contra la empresa involucrada, multas o incluso, aumentar los aranceles a los productos específicos que fabrique esta planta.
LEG