Cada quien interpreta los resultados, de acuerdo al cristal con que los mire. Sí, a partir de su ideología, y manejan los números a su conveniencia.

Para unos, perdió Morena en la Cámara de Diputados, porque ya no tendrá junto con sus aliados, la mayoría calificada. No podrá el Presidente hacer cambios constitucionales. No se podrá reelegir, festejan.  

Pero los que sí están con AMLO celebran que poseerán la mayoría absoluta, que les permitirá manejar el dinero y hacer cambios legales, sin problemas. No pudieron contra nosotros, y por eso estamos felices, felices, felices. El proyecto de transformación continúa.

Para unos, perdió Morena el control de muchos congresos locales, lo que ofrecerá pluralidad en los estados, y se nivelaron las presidencias municipales. Le dimos un “estatequieto” al oficialismo y frenamos al partido en el poder. La elección del 18 y la del 21 fueron muy distintas, festejan.

Pero los que sí están con AMLO festejan diez u 11 gubernaturas. Ya tendremos el control de la Conago, se debilita la Alianza Federalista, y la GOAN pues nomás ya no la tomaremos en cuenta. ¿Cómo dicen que nos ganaron si ganamos dos terceras partes del pastel? Se burlan y pitorrean.

Para unos, la Ciudad de México amaneció dividida. De un lado los que sí pagan impuestos, y en el otro lado, los que se benefician de los impuestos a través de apoyos sociales. Logró Morena dividirnos como en Berlín, con el Muro del Pejín, donde las clases medias viven de un lado, y los “jodidos” del otro.

Pero los que sí están con AMLO, aseguran que gobierna la izquierda al mayor número de habitantes, y que los “apoyos” seguirán llegando puntualmente. Las alcaldías más importantes, populares y populosas, siguen siendo color guinda, festejan. Les dimos su merecido a la derecha, a pesar de que lucraron con la línea 12 del metro. 

Insistimos, cada quien interpreta la realidad con sus números, sin fijarnos que son las mismas cifras, vistas desde la comodidad de un club de golf, o en los arrabales. Los mismos resultados, vistos bebiendo whisky o chela. La misma elección pues, que se ve distinto desde una iMac que en un teléfono móvil con “plan amigo”.

Así es la política, así es la competencia electoral. Así es la vida pues. Seguimos divididos, seguimos enojados y confrontados. Y claro, tenemos citas en la agenda para volver a las urnas: juzgar a los expresidentes, revocación de mandato y elección federal en 2024 (presidencial).

Pero más allá de cómo interpretamos los resultados, preguntémonos si ¿continuará la alianza Va por México?

Para muchos fue un fracaso, para otros, la única esperanza para competir en tres años. ¿Se les unirá Movimiento Ciudadano o volverán a ir solos?

Desde las últimas horas del pasado domingo, el perredista maldijo al PAN; el priista al PRD, y el panista al tricolor, que nada aportó. ¿Volverán a ir juntos o de plano la aventura opositora se acabó? ¿Pronto renunciarán Jesús Zambrano, Marko Cortés y Alejandro Moreno? 

Con valor y con verdad. Casi 45 millones de mexicanos prefirió ver la televisión, que ir a votar. A pesar de ello, hubo más participación que en otras intermedias… Mientras todos observamos tablas y resultados, oficializaron la ampliación del mandato del ministro presidente Zaldívar en la SCJN; la reforma al Poder Judicial avanza. Ahora está en manos del máximo tribunal la afirmativa o negativa a que se quede en el cargo hasta el 30 de noviembre de 2024… una vez más, para algunos la alianza PAN-PRI-PRD fue un fracaso, para otros, la única manera de equilibrar (más o menos) el ejercicio del poder. Hagan su apuesta. ¿Desaparece Va por México?

*Periodista, editor y radiodifusor

@GustavoRenteria

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