La violencia se está generalizando en todo el territorio nacional por la pasividad y complicidad del Gobierno federal frente a los grupos criminales, aseveró el dirigente nacional del Partido acción Nacional, Marko Cortés.
Lamentó que, con total impunidad, los delincuentes masacran a civiles inocentes para sembrar terror en la población, ante la total inoperancia de los cuerpos federales de seguridad.
“Estamos llegando a la mitad del sexenio y no vemos resultados en materia de seguridad. No hay ningún avance, por el contrario, los grupos delictivos están ganando más terreno ante la pasividad y complicidad del Gobierno federal.
Es decepcionante lo que estamos viviendo con un Gobierno que nos prometió pacificar el país”, comentó.
Cortés explicó que esta preocupación se basa en los informes oficiales más recientes que señalan mayo pasado ha sido el más violento de este año, con dos mil 963 homicidios y uno de los más sangrientos de este sexenio.
Así como, continuó, el aumento de 3.57% de los asesinatos respecto a abril, y el incremento de 30% para el delito de violación y 7% en feminicidios.
A estos datos se añaden las cifras que dejó la violencia política durante el pasado proceso electoral que, de acuerdo con el Sexto Informe de Etellekt, se registraron un total de 910 agresiones en contra de políticos y candidatos, con un saldo de 860 víctimas, entre las cuales destacan 91 políticos y 36 de estos candidatos asesinados, dijo el líder panista.
“Nosotros le hemos exigido al Gobierno federal que presente una verdadera estrategia contra la delincuencia organizada, pero el Presidente no ve ni oye a los mexicanos”.
La nueva correlación de fuerzas en la Cámara de Diputados, continuó, deberá permitir que en el Presupuesto de Egresos 2022 se puedan destinar más recursos para seguridad a estados y municipios.
SIN RESULTADOS EN COMBATE A LA CORRUPCIÓN
Para el coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, Juan Carlos Romero Hicks, la remoción de la titular de la Secretaría de la Función Pública (SFP), Irma Sandoval, confirmó el fracaso de las estrategias contra abusos de autoridad y constante ilegalidad de funcionarios del Gobierno federal y sus parientes.
Dijo que el combate a la corrupción debe ser efectivo mediante la estricta aplicación de la ley “y no únicamente en tema de discursos, encuestas demagógicas y onerosas, o acciones fallidas que sólo consolidan la impunidad de los delincuentes”.
LEG