Netflix apostó por presentar el otro lado del narcotráfico, el de las víctimas. Somos se estrenó el pasado 30 de junio y a lo largo de seis capítulos muestran los días previos a la masacre de Coahuila.

En la televisión se ha glorificado la imagen de los narcotraficantes en producciones como Narcos, La Reina del Sur, El Señor de los Cielos, entre otras pero ¿Y las víctimas? Esa es la contraparte que muestra Somos, la nueva producción de Netflix que se estrenó el pasado 30 de junio en más de 190 países.

La miniserie producida por James Schamus está basada en el reportaje Anatomía de una Masacre de Ginger Thompson en la que la periodista estadounidense se sitúa en Allende, Coahuila, lugar en el que Los Zetas ingresaron al poblado ejecutando y desapareciendo a varios habitantes de la región a causa de una operación fallida de la DEA.

Jero Medina es Benjamín Linares, personaje clave de lo que ocurre previo a la tragedia. Benjamín es el hijo de Isidro y Sandra Linares, dueños del Rancho Central y trae una deuda con los delincuentes.

“Es algo nuevo, ya que es una serie que no abarca el mismo punto de vista de las típicas historias de los narcotraficantes y en su lugar trae el de las víctimas. Hacer a Benjamín ofreció retos personales dentro de mi trabajo y trajo mucho valor al adentrarme en dicho personaje”, declaró Medina en entrevista con 24 Horas.

Somos es la primera serie que habla sobre el narcotráfico desde la perspectiva de las víctimas dándoles voz y visibilidad de una forma más humana y retratando las vidas de los habitantes y como el crimen organizado influye en sus vidas.

Para Jero el trabajar en un proyecto de esta magnitud le ha traído más conocimientos sobre lo que acontece en el país.

“Definitivamente Somos es algo más profundo. Es una serie con la que nos podemos identificar ya que estamos más cerca de ser víctimas que parte de los delincuentes. Lo que sucede te borra las líneas de los límites de lo que existe en un México que la ha sufrido”, reflexionó.

Aunque el caso de la Masacre en Allende sucedió en marzo del 2011 en el sexenio de Felipe Calderón, Jero Medina menciona que esto no ha parado y que en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador las cosas no han sido distintas.

“Creo que está más fuera de control ahorita. Veo lejos la imagen de que no haya violencia por cuestión de drogas ¿Cómo paras eso? Mientras estamos hablando de esta historia se están generando otras del mismo calibre”.

Jero Medina considera que antes de eliminar el narcotráfico se deben erradicar otras cuestiones. “Esto es producto de una sociedad y gobierno disfuncionales. El que lo controlen por medio de la impunidad me da una nula visión de lo que podría pasar en un lapso de 10 años. Es un tema muy grave y siento que México está yendo para abajo”

El leer el reportaje de Ginger Thompson fue algo revelador para los actores de la serie ya que ponerse en el lugar de las víctimas es un giro distinto a lo que se ha presentado en cuanto contenido. “Definitivamente fue impactante, vi el tamaño de lo que estábamos haciendo y la importancia. El hacerlo fue una gran responsabilidad y se le merece todo el respeto a los involucrados”, finalizó.

Datos: La serie se grabó en algunas sedes de Durango y en Gómez Palacios se adaptó un Centro de Readaptación Social vacío como penal.

Los escritores de la serie buscaron retratar a personajes femeninos poderosos para romper los estereotipos típicos en series de TV.

Frases: “Mientras estamos hablando de esta historia se están generando otras del mismo calibre”.

“Estamos más cerca de ser víctimas que parte de los delincuentes”.

LEG