Grietas de medio kilómetro y hasta cinco metros de profundidad se formaron recientemente en ejidos de Atenco y a un costado de río Papalotla, lo que ha generado preocupación entre los habitantes de la región mexiquense.

Los huecos, que atraviesan parcelas cultivadas, ríos y caminos, surgieron desde el 13 de mayo pasado.

Los campesinos, algunos integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, pidieron ante la Comisión Nacional del Agua (Conagua) tomar cartas en el asunto.

Los afectados denunciaron que las fracturas están en los costados de la autopista Texcoco-Pirámides, obra complementaria al cancelado aeropuerto internacional, que se construyó afectando cinco de sus ejidos.

LEG