La pasada administración del Gobierno de Tamaulipas, encabezada por Egidio Torre, ocultó el hallazgo de restos humanos en el sitio conocido como La Bartolina, donde hoy se sabe que funcionó una zona de exterminio.
En un boletín emitido el 12 de abril de 2016, el Grupo de Coordinación de Tamaulipas “informa que el domingo 10 de abril se dieron por concluidas las labores de exploración en terrenos del ejido La Bartolina del municipio de Matamoros, donde inicialmente se corrió la versión del hallazgo de fosas clandestinas”.
“Precisa que en los terrenos del ejido que fueron objeto de revisiones por parte de personal de Servicios Periciales y elementos del Ejército no se encontraron fosas de ninguna naturaleza, solamente un tambo de 200 litros de capacidad que contenía cenizas y fragmentos óseos, desconociéndose si son humanos o animales”, se indicó en el documento.
Sin embargo, el 7 de julio pasado, Karla Quintana, titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, fue la primera funcionaria federal en hablar de esa “cocina del narco”.
“En 2017 -y creo que esto se conoce poco- se dio el hallazgo de un sitio de cremación clandestina de dimensiones muy grandes, cerca de Matamoros, Tamaulipas, muy cerca de la frontera con Brownsville, un lugar conocido como La Bartolina. Es un brazo de mar que está muy cerca de la costa, aproximadamente a 12 kilómetros”.
Quintana recordó que en un inicio intervino la Fiscalía General del Estado de Tamaulipas, y desde hace poco más de dos años quien está procesando ese lugar es la FGR.
El sábado, este diario publicó la historia de La Bartolina, un zona de exterminio que operó en Tamaulipas, donde de acuerdo con la CNB han rescatado media tonelada de cenizas de lo que eran restos humanos.
Entrevistada por este medio, la activista Josefina de León -integrante de la Red de Desaparecidos de Tamaulipas- indicó que desde 2016 se localizaron restos humanos, además de que en Tamaulipas hay, al menos, dos zonas de exterminio más: El Triángulo y la Zona Cañera.
LEG