Nos aventuramos junto con el Audi Q5 a constatar sus prestaciones en seguridad y tecnología, así como el manejo que tanta buena fama ha cobrado. La ciudad y carretera pusieron a prueba su desempeño y no decepcionó.
Lo primero y más llamativo del Audi Q5 es la tonalidad tan particular que la marca lo denomina verde distrito metalizado, color que de inmediato capta las miradas puesto en una estructura que cuenta con un frente en el que destaca una parrilla prominente tipo panal, forma que prevalece en su marco exterior y que encuadra los cuatro aros.
Los faros Matrix, compactos y funcionales, con luz LED de firma lumínica permanente, faros de niebla circundados con un acabado negro y el difusor que le da una buena presencia.
Audi es conservador en sus trazos a lo largo de la carrocería. Musculatura tenue y bien esculpida que es embelesada con unos rines de 20 pulgadas. Las barras longitudinales en color negro a lo largo del techo hace un gran juego cromático con los pilares B y C.
En la parte trasera, las calaveras son OLED interactivas que cambian de acuerdo al modo de manejo que se seleccione, un alerón, luces direccionales y el difusor completan el juego.
En el interior, sin duda se percibe un habitáculo premium con acabados suaves en la mayor parte de las superficies.
Volante multifunción de estilo deportivo con buen tacto y agarre, consola central en la que predomina el acabado negro piano en la zona de la palanca de cambios. Aire acondicionado de tres zonas, una pantalla táctil de 10 pulgadas de buena resolución y un clúster digital con el sitema denominado Audi Virtual Cockpit en una pantalla horizontal de 12.3 pulgadas.
El espacio es muy bueno en la primera fila y suficiente en la segunda. No habrá queja para ninguno de los pasajeros, ni en viajes largos. Buena sujeción para piloto y copiloto con espacios para almacenamiento en el compartimento bajo el descansabrazos, consola y el ya infaltable cargador inalámbrico.
En lo que respecta al manejo, mucho hay que destacar y poco de qué quejarse. En la versión S-Line, que fue la que probamos, la suavidad al momento de circular, ya sea en ciudad o carretera es plausible. La suspensión McPherson independiente delantera absorbe de gran forma el desgaste o sorpresas que presenta el camino.
La dirección es de destacar. El volante se comporta con una precisión impresionante y el vehículo gira con agilidad asombrosa.
Con el modo sport se percibe notoriamente la potencia del motor 2.0 litros, una apuesta segura en el Grupo Volkswagen y que en el Q5 funciona tremendo. Respuesta contundente y la frenada con el sistema ABS igualmente oportuna. Los cambios de velocidad son precisos, tenues.
Los sistemas de seguridad como las alertas de punto ciego, proximidad, y anticolisión son oportunas y no se sienten intrusivas.
El sistema de audio Bang & Olufsen se escucha con gran fidelidad y la sensación en el habitáculo es muy relajada. Particularmente, percibimos la insonorización buena, aunque de vez en cuando se alcanzan a percibir algunos sonidos exteriores.
Algo con lo que se complementa este anáisis es el precio. Al tratarse de una marca premium, las cifras son altas, sin embargo, Q5 en su precio base ofrece un plus que puede ser el diferencial con sus adversarios, ya que es uno de los más bajos, sino es que el menor.
AUDI Q5 2021
Desde 929 mil 900 pesos
MOTOR
4 cilindros de 2.0L
249 caballos de fuerza
272 lb-pie de torque
Transmisión S tronic 7 velocidades
Tracción quattro
SEGURIDAD
Seis bolsas de aire
Cámara de reversa
Frenos ABS
INFOENTRETENIMIENTO
Pantalla táctil de 10.1 pulgadas
Aire acondicionado de triple zona
Compatibilidad Apple CarPlay y Android Auto
Audi Virtual Cockpit
EL BALANCE
A FAVOR
Dirección. Una de las cosas que más presume Audi con su vehículos es la precisión de sus volantes. En un inicio se torna raro manejar con un volante tan justo en sus giros, aunque con el paso de unos minutos uno se acostumbra y por supuesto que se disfruta de gran manera.
Tracción. Al contar con una tracción integral (Quattro), la experiencia al volante se disfruta especialmente en carretera, puesto que se distribuye de gran manera entre las cuatro ruedas las transferencias que se producen por la fuerza en curvas.
A CONSIDERAR
Eficiencia = menos potencia. Audi Q5 tiene cuatro modos de manejo, aunque en el Efficiency y un poco menos en el confort, se percibe un turbolag que si bien no es grave, no es la respuesta que se nota en el modo sport, donde la respuesta del acelerador es inmediata.
PRICIPALES COMPETIDORES
Alfa Romeo Stelvio
Lincoln Corsair
Volvo XC60
Acura RDX
BMW X3
LEG