Estados Unidos avanza en su agenda digital
Por: Juan Manuel Torres Esquivel
El gobierno de Biden está avanzando fuerte para la regulación del ecosistema digital y parece que poco a poco está ganando terreno frente a los gigantes tecnológicos. Esta ha sido una deuda pendiente que el gobierno de EEUU tenía con su electorado y el sistema democrático.
Luego de la victoria del Presidente Trump, diversos congresistas y líderes políticos comenzaron a poner en duda la viabilidad de la regulación de la comunicación digital; en este sentido, la sección 230 de la Ley de Decencia en las Comunicaciones de los Estados Unidos es uno de los puntos centrales de la discusión por dos razones: La primera, porque de ésta derivan muchos de los problemas que actualmente atraviesa la democracia estadounidense y, la segunda, porque reformarla será la punta de lanza para el futuro del ecosistema digital en el mundo.
En el Congreso, la regulación sobre los medios digitales está avanzando, esta semana, dos legisladores demócratas presentaron una ley para modificar la sección 230 respecto a temas médicos. Lo que se está buscando es que las redes sociales tengan menos capacidad de deslindarse de la responsabilidad de controlar la desinformación alrededor de la vacunación en Estados Unidos. Esta legislación se suma a otras que se han presentado en el Congreso y que están aumentando la presión sobre la viabilidad de continuar con la sección tal y como está. De acuerdo con congresistas estadounidenses, la legislación a la que están sujetas las plataformas debe cambiar, pues ha sido rebasada por los retos actuales del mundo.
Otro de los aspectos que está buscando “meter en cintura” la administración del Presidente Biden, es la regulación en materia de competencia de los gigantes tecnológicos. Esta regulación va encaminada principalmente a atacar el monopolio que tienen tanto Facebook como Google en materia en el ámbito de la publicidad digital como en el contenido digital. La Comisión de Competencia de los Estados Unidos ha perdido el primer round en contra de Facebook, sin embargo especialistas aseguran que esto sólo es temporal y que en realidad la sentencia del juez podría venir en sentido contrario de lo que espera Facebook. Esto podría ser tan duro como la separación de la empresa en distintas unidades de negocio. La FCC no va a quitar el dedo del renglón y menos con los perfiles tan críticos que tiene al frente.
En materia de ciberseguridad, la administración de Biden también trabaja fuerte para cambiar la narrativa. Tras los ataques rusos y chinos que han registrado empresas estadounidenses como Solarwinds, Microsoft o JBS USA, el gobierno demócrata ha trabajado muy de cerca con sus agencias de inteligencia para fortalecer los protocolos en materia de ciberseguridad y combate a los ataques de otros gobiernos a la infraestructura de Estados Unidos. Incluso, esta semana el presidente Biden ha puesto a disposición de todos los usuarios del DarkWeb una recompensa por 10 millones de dólares a aquellos individuos que estén dispuestos entregar información de valor que ayude a combatir los ataques planeados en contra de las empresas de EEUU. Además, el Pentágono ha dado a conocer que tiene planes de aumentar su capacidad militar en materia de Inteligencia Artificial.
Finalmente, en materia de infraestructura, el gobierno del presidente Biden está tratando de sacar en el Congreso un ambicioso proyecto para conectar a todos los norteamericanos con la banda ancha. Esta legislación ha tenido muchas críticas principalmente por el alto costo que tendría para el Gobierno, sin embargo, de lograrlo, sería una importante victoria tanto en materia de política doméstica como exterior y se estaría enviando un mensaje sobre la importancia que tiene la innovación y la digitalización, en términos de lo que ésto beneficia en sus capacidades políticas, empresariales y militares. Todas estas acciones nos dejan ver una agenda muy innovadora y enfocada en robustecer el control que el gobierno tiene sobre el ecosistema digital, un espacio que hasta el momento se había dejado en total control de los gigantes tecnológicos.
Mientras eso pasa en EE.UU, ¿qué sucede en México?
El gobierno parece no tener mayor cuidado en estos temas. Ya van 3 años desde que el Presidente tomó protesta y, hasta el momento, no hay ningún encargado de la política tecnológica y la digitalización del país. Proyectos como la conexión de toda la nación están en el olvido y el ecosistema digital cada día está más plagado de odio y desinformación.