La piscina de Tokio 2020 ha sido escenario de dos momentos inolvidables en el inicio de esta jornada en el País del Sol Naciente, pues se han establecido dos nuevas marcas olímpicas. La australiana Ariarne Titmus sigue dominando en la rama femenil al llevarse su segundo oro, esta vez en los 200 libres. En tanto, el húngaro Kristof Milak mostró su dominio en los 200 mariposa, donde además de llevarse la presea áurea, rompió el récord que Michael Phelps impuso en Beijing 2008.
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Milak ya contaba con el récord mundial y la prueba que quedaba pendiente era Tokio 2020, donde fue implacable. Los 200 mariposa, la especialidad de Michael Phelps, el máximo medallista de la historia dejó un registro que parecía inalcanzable en el crono, al menos en varios años, el húngaro lo superó.
El tritón europeo paró el reloj con un tiempo de 1:51.25, lo que significó una ventaja respecto al segundo lugar, el japonés Honda Tomoru, quien cronometró 1:53.73, es decir, dos segundos, 48 centésimas de diferencia. El italiano Federico Burdisso completó el podio.
Esta nueva marca deja el anterior impuesto por Phelps en 1:52.03, que lo impuso en Beijing 2008.
La sirena australiana de Tokio
Otra de las estrellas del agua en estos Juegos de Ariarne Titmus, quien ya se había adjudicado el oro en la prueba de los 400 metros estilo libre, y ahora, volvió a reinar en los 200 de la misma especialidad y con récord olímpico incluido.
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Ariarne dejó un tiempo de 1:53.50, con lo que desvanece la anterior marca y se consagra de momento como la figura femenil del agua en Tokio 2020.
El podio lo completaron Siobhan Bernadette Haughey de Hong Kong al ganar la plata y el bronce se lo adjudicó Penny Oleksiak de Canadá.
LDAV