Esta mañana, el canciller Marcelo Ebrard subrayó que “vamos a ganar el juicio”, con respecto a la demanda presentada por el Gobierno de México en contra de las empresas fabricantes de armas en Estados Unidos.
El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) refirió que el proceso de la demanda tomó dos años, esto con la intención de que se “pudiera obtener éxito y que sea factible en Estados Unidos”.
Ebrard Casaubón subrayó que el procedimiento es una demanda civil, la cual busca que las empresas demandas -entre las que están Smith & Wesson, Beretta, Century Arms, Colt, Glock y Ruger y Barrett– compensen al gobierno de México “por los daños causados por sus prácticas negligentes; el monto de esta diligencia será determinado en el juicio”.
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Además, se pretende que los fabricantes desarrollen estándares razonables y verificables para monitorear “y en su caso, disciplinar a sus distribuidores”.
Lo anterior, porque las empresas cuentan con los datos de cuando alguien “compra 50 Barretts, y si compran tres veces, tienen toda la información. Y no sólo eso, están desarrollando diversos modelos para el narco. Están hechas para eso, para que las compren, tienen diferentes tipos de arreglos”.
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En la querella, presentada por los abogados Steve Shadowen, Richard M. Brunell y Jonathan E., en la Corte de Distrito de Massachusetts Lowy se indica que en la violencia en el territorio mexicano, generada por los cárteles de la droga están involucradas armas fabricadas en Estados Unidos y que son introducidas de manera ilegal.
LV