París está en plenas vacaciones de agosto, y normalmente es una ciudad tranquila en estos días, pero ayer fue muy diferente, y es que la presentación de Messi en el Arco del Triunfo desató la locura entre cientos de miles de fanáticos que anhelaban ver al argentino.
Apenas hace unos días París recibió la estafeta de Tokio para los próximos Juegos Olímpicos, y ahora vio como un futbolista fue capaz de quitarle la calma a una ciudad que por estas fechas suele tener mucha tranquilidad, aunque ahora llegó la Messimanía para darle esperanza al PSG de ganar por primera vez la Champions League.
La familia Messi pasó la noche en el hotel Royal Monceau, y a escasos 500 metros está el Arco del Triunfo, y en dicho tramo, se agolparon miles de seguidores del PSG y hasta los que sólo querían ver al delantero para constatar su imán para atraer masas.
LOCURA COMERCIAL
A unos pasos del Arco del Triunfo, en los Campos Elíseos se encuentra una de las tiendas oficiales del PSG, y faltaban horas para que abriera el establecimiento, pero las filas ya eran de más de 200 metros. Cientos de fanáticos de Messi, algunos solamente del argentino, querían ser de los primeros en ingresar para adquirir la camiseta con el dorsal 30, o cualquiera de los artículos que puso a la venta el club con imágenes alusivas a su nuevo fichaje.
Cada persona estaba dispuesta a desembolsar 157 euros por la camiseta con el nombre y número del refuerzo más sonado en la historia del PSG.
«Soy un fan de Messi, si tengo que hacer cola todo el día para tener su camiseta lo haré», señaló Djibril, de 23 años.
PALABRAS DE SU NUEVO ÍDOLO
Messi ya declaró por primera vez como jugador del equipo galo. «Estoy muy agradecido a la gente, fue una locura. Yo estaba en Barcelona y la gente ya estaba en la calle. Quiero agradecerles y vamos a disfrutar muchísimo», palabras dedicadas a los miles de seguidores apostados en las calles parisinas.
PARECÍA FIESTA DE FIN DE AÑO
Mientras Messi daba su primera conferencia como jugador del PSG, caía la noche en París y comenzaron los fuegos artificiales y bengalas de parte de miles de seguidores que pintaron la capital francesa con los colores del equipo de sus amores.
Todavía no disputa un minuto con su nuevo equipo, y la Messimanía ya llegó a París, ahora los hicnhas esperan que el delantero responda con goles y les de el soñado título de la Champions League.
LEG