El Bosque de Chapultepec alberga por si solo diversos atractivos para sus visitantes: el Castillo, el Zoológico, el lago, el Altar a la Patria… Sin embargo, uno de los menos visitados pese a su antigüedad de más 700 años son los Baños de Moctezuma, donde alguna vez se escuchó el murmullo del agua fresca y pura.
Enclavada en las faldas del cerro de Chapultepec, una alberca de piedra de seis metros de profundidad queda como testimonio de lo que fue uno de los pilares del acueducto subterráneo que abasteció de agua a la antigua ciudad de Tenochtitlán.
“La función principal de lo que se conoce como Baños de Moctezuma era almacenar agua para distribuirla a la ciudad; pues mucha del agua proveniente de Santa Fe tenía una carga importante de minerales, lo cual no era factible para el consumo humano, entonces parte de este sistema tenía la función de depurar el agua”, explica Jorge Valtierra, historiador de la Universidad La Salle.
Sobre el por qué se llama Baños de Moctezuma al lugar, comentó que existe el mito de que los tlatoanis se bañaban en ese punto, cuando en realidad los nobles mexicas tomaban baños cerca de lo que hoy se conoce como las escalinatas de la emperatriz Carlota.
Ante las pocas visitas a este lugar ancestral, constatadas por este diario, el especialista en historia resaltó que se debe a que el área no está dirigida al público en general, no se ha fomentado la importancia del patrimonio cultural y tampoco se incentiva a los estudiantes a acudir.
Cabe destacar que la pureza de los manantiales del cerro permitieron que el sistema de abastecimiento de agua mexica evolucionara en la época colonial para construir el acueducto de Avenida Chapultepec, que desembocaba en una fuente en Salto del Agua, así como otro que fluía por lo que hoy es Circuito Interior hacia San Cosme.
Hoy en día, del acueducto de Chapultepec solo quedan vestigios: hermosos arcos de estilo colonial en medio del camellón sobre la avenida, que ya no conducen a ninguna parte, pues las fuentes que conectaba han sido reubicadas.
La de Belén (del inicio del acueducto) fue llevada a las afueras de Metro Chapultepec, y la de Salto del Agua (donde finalizaba) a un convento en Tepotzotlán, Estado de México… pues la que actualmente se encuentra en la esquina de Avenida Arcos de Belén y Eje Central se trata de una réplica.
LEG