Los programas sociales implementados por la actual administración no alcanzan a cubrir la totalidad de hogares que se apoyaban con el programa Prospera, que se operaba en el sexenio anterior, lo que evita combatir la pobreza y el desempleo actual.
Así lo consideraron los miembros del sector privado, quienes advierten que de no emprender acciones que mitiguen los efectos de la pandemia y reactiven las inversiones, la pobreza se mantendrá en aumento durante 2021 y 2022.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) refirió que en 2018, el programa Prospera llegaba al 18% de los hogares, en 2020 ningún programa lo ha superado. La Pensión a Adultos Mayores alcanza el 15%, la Beca Benito Juárez para Educación Media Superior y Educación Básica llega al 6% de los hogares y Jóvenes Construyendo el Futuro solo al 1%.
“Es falso que el 70% de los hogares mexicanos reciban un apoyo del gobierno, sólo 3 de cada 10 hogares en el país son beneficiarios de algún programa social”, lamentó.
Agregó que los programas sociales que presume el Gobierno no están siendo redituables para apoyar a las familias de escasos recursos y por ello, son insuficientes para combatir la pobreza.
Recordó que la pandemia por Covid-19 ha significado una doble amenaza: para la salud y la economía de los mexicanos. Uno de los efectos más visibles es el desempleo y la consecuente pérdida de ingresos.
Y es que según el Consejo Nacional de Evaluacion de la Politica de Desarrollo Social (Coneval), los 19 programas del Gobierno federal relacionados con intervenciones de desarrollo social no son relevantes en el contexto de la actual emergencia. Por ejemplo, la mayor parte de la población beneficiada por el Programa de Pensión para Adultos Mayores se encuentra fuera del mercado laboral.
“Los programas que se dirigen al sector rural podrían ser menos relevantes durante la emergencia en relación con los urbanos, las afectaciones económicas más intensas se observan en las ciudades”, indicó la Coparmex.
LEG