A una semana del regreso a clases presenciales, los docentes consideran que no existe un panorama claro acerca de la forma de trabajo con los alumnos y advierten de un desempeño disparejo.
Nadine Zúñiga, profesora en la escuela secundaria 114, afirma que ha sido baja la asistencia de estudiantes a las aulas: “Creemos que será poco a poco, es empezar a perder un poco el miedo, pues el riesgo sí existe”.
Asimismo, otro maestro de secundaria, de la alcaldía Xochimilco, asegura que el modelo escalonado: “Ayuda a evadir la responsabilidad de los chicos… Tendrán grandes carencias intelectuales”.
Añadió que en la escuela donde imparte clases, ante la baja afluencia de estudiantes, han tratado de establecer contacto mediante plataformas digitales: “Muchos no han aceptado mi invitación al Clasroom, mucho menos han asistido a las reuniones”, dijo.
“Hay quienes están ausentes y no se reportan ni a la distancia… Los de tercer año (de secundaria) tienden a no acudir y no estudiar”, ejemplificó.
Explicó que lo anterior provoca que haya poca organización al momento de hacer las correspondientes evaluaciones.
De igual forma, refirió que tras pláticas con otros integrantes del magisterio se ha enterado de que no en todas las escuelas tienen las mismas medidas en cuanto a quienes deciden continuar con la educación desde casa, pues en la secundaria donde labora se incentiva a los maestros a tener contacto con los alumnos de manera virtual, aunque la orden de la SEP es que todo sea de manera presencial.
Sin embargo, aclaró que para tener resultados certeros sobre el rezago de los alumnos: “Hay que esperar a los diagnósticos que se estarán realizando estas dos semanas”.
“No son pruebas estandarizadas, así que es una evaluación cualitativa… Si por atender las necesidades de cada escuela se pierde la perspectiva global habrá problemas”, enfatizó.
En lo que respecta a los lineamientos sanitarios, sugiere que: “Se debe establecer un nuevo pacto entre la comunidad escolar, también hay que orientar a los jóvenes hacia la autonomía en su preparación, de lo contrario será una generación fracasada en términos de independencia y desempeño”.
CLASES ESCALONADAS RETRASAN DIAGNÓSTICO
Mientras, Ramón Labriega, profesor en la secundaria 79, afirma que los grupos escalonados retrasan todo diagnóstico. “Esta semana hicimos un examen a un grupo y lo aplicaremos a otro en la siguiente. Faltarían los que no están viniendo de manera presencial”, dijo.
Añadió que en su escuela se suspendió “por órdenes superiores” el contacto con quienes toman clases virtuales, por lo tanto: “No habrá forma de hacer un diagnóstico con certeza”.
Manifestó que pese al retraso educativo de más de un año, aunado al atraso en las evaluaciones diagnósticas, las autoridades confían que se regularice al alumnado en los primeros tres meses de este año, lo que considera “imposible”.
Un estudio del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) revela que el rezago educativo causado por la suspensión de clases presenciales es equivalente a aproximadamente 1.8 años de escolaridad.
AR