Al terminar la primera fecha FIFA triple en el área de la Concacaf encontramos a la Selección Mexicana en el primer lugar, en calidad de invicta y con dos puntos de ventaja sobre sus seguidores que son Estados Unidos, Canadá y Panamá, sin embargo el Tri tiene divididas las opiniones sobre su accionar, porque hay quienes pensamos que va bien y otros que es una ilusión óptica porque no juega bien.
Así es, el equipo de Martino sigue en la polémica, porque ante la realidad numérica está otra idea que es que se gana por lo débil de los rivales, por suerte, contrastando esto con el pensar de jugadores y cuerpo técnico que se dicen estar conformes con lo realizado hasta el momento.
La suma de puntos es innegable que es buena, tampoco se puede negar que el accionar del equipo en muchos momentos de los juegos contra Jamaica, Costa Rica y Panamá no fue buena y que se metió en problemas prácticamente provocados por los altibajos que tienen en su accionar.
Es un hecho que a un sector de los medios de comunicación por así convenirles o por análisis correctos, el comentario de que las eliminatorias son muy complicadas, que jugar bien estos partidos resulta muy difícil no les llena y no lo creen y esto un fuerte sector del público también lo asume como un verso sin bases.
Por el contrario, hay quien asume esto como una realidad y que lo único importante en las eliminatorias es el sumar puntos y lograr el objetivo sin importar las formas, hay que calificar y punto, así de claro lo asumen comunicadores y aficionados.
En lo particular, creo que se está cayendo en los extremos, que ambas partes tienen sus puntos de razón, pero tampoco se puede ser tan directo en el juicio, porque es verdad que se tiene que sumar como prioridad, también es verdad (lo digo por mis experiencias en esta clase de eventos) que son juegos diferentes y complicados, pero no se puede negar que no se logra tener un dominio de los partidos con base en jugar mejor que los rivales del área.
México suma y eso está muy bien, pero también ha sufrido porque es irregular en su rendimiento y sobre todo aqueja un problema que no es actual, la falta de efectividad ante los contrarios y se dejan ir muchas oportunidades de asegurar los marcadores para manejar mejor los partidos.
Culpar a Funes Morí de esta falta de capacidad goleadora tampoco me parece del todo correcta, porque si falló, pero la verdad es que se genera poco para los ejes de ataques, el gol del Tri no pasa tanto por el centro delantero.
También hay que señalar que en los tres partidos el arbitraje dejó de marcar claros penales a favor de México que pudieron dar tranquilidad en los resultados.
Los hechos son buenos, el primer paso está dado y fue firme, ahora a esperar que dentro de un mes con Jiménez, Lozano, Herrera, Vázquez y Lainez, la banda europea de este equipo mejore en rendimiento y fondo futbolístico y reafirme lo logrado hasta el momento y aunque es difícil de lograr, unifique a la prensa y aficionados.
@raulsarmiento