Los Steelers de Pittsburgh comenzaron la temporada regular con marca de 1-1, y con la esperanza de pelear por la División Norte de la Conferencia Americana de la NFL con los Ravens.
Pero hoy recibieron una pésima noticia, pues colocaron a su quarterback Ben Roethlisberger en la lista de lesionados y todavía no saben si podrá jugar el próximo domingo contra los Bengals de Cincinnati.
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En la tradicional conferencia de prensa de los martes, el head coach Mike Tomlin informó que el emblema de la franquicia tiene una lesión en el pectoral izquierdo, aunque no sabe en que momento del partido pasado se dio la lesión.
“No sé específicamente cuándo se lastimó Ben en el juego”, dijo Tomlin. “No sé si él lo sabe. Ustedes saben, a veces en medio de la competencia, adrenalina y eso, simplemente no lo sabes. Algunas cosas solo saltan hasta después”.
En la derrota de los Acereros contra los Raiders, Big Ben fue capturado un par de ocasiones atrás de la línea de golpeo, aunque lo golpearon 10 veces, y en cualquiera de esas ocasiones se pudo dar la lesión.
“Sí, fue demasiado”, dijo Tomlin. “Recibió demasiados golpes. Podemos correr mejor el ovoide. Podemos sacar el balón de sus manos más rápido. Podemos mantenernos apegados al calendario y no rezagarnos con respecto a los downs, y meternos en situaciones donde la línea del juego está tan lejana que eso ayuda la presión sobre él”.
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Hace una semana, Roethlisberger dijo haber sentido algo del dolor asociado con el primer partido, y lo admitió nuevamente después del segundo.
“Estoy decepcionado que perdimos el partido, y estoy decepcionado de que no jugamos suficientemente bien para ayudarnos a ganar el encuentro”, dijo el domingo. “Los golpes y moretones que vienen con el futbol americano”.
EAM