La Fiscalía General del Estado de Guanajuato detuvo a los responsables de la explosión de una bomba en el restaurante Barra 1604, en Salamanca, Guanajuato, que provocó la muerte de dos personas: Mario Hernández Cárdenas y Mauricio Romero Morales, gerente y dueño del establecimiento.
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Los dos detenidos, por el crimen ocurrido el domingo pasado y que también dejó cinco heridos, son acusados por los delitos de homicidio calificado y homicidio calificado en grado de tentativa y fueron puestos a disposición de un juez de control, informó el fiscal del estado, Carlos Zamarripa, al presentar a los responsables y dar a conocer los detalles del atentado, presuntamente por problemas financieros.
Según la dependencia estatal, se estableció que una mujer, identificada como Georgina N, solicitó el servicio de un motorepartidor de paquetería desde un domicilio ubicado en la calle Constituyentes, a 12 kilómetros de donde se ubicaban las víctimas del artefacto explosivo, que estaba embalado en una caja de madera como regalo.
Por medio del rastreo de teléfonos celulares y del análisis de 600 horas de video, se estableció la ruta del origen del paquete bomba.
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De acuerdo con la Fiscalía estatal, Georgina N y Eduardo N (el otro detenido) conocían a Mauricio, con quien presuntamente habían realizado algunos negocios que no tuvieron buenos términos y generaron un adeudo millonario, así como diferencias irreconciliables, luego de un depósito por una suma considerable, sin especificar el monto o más detalles de la relación comercial.
Los presuntos responsables, explicó Zamarripa, arribaron el 19 de septiembre de 2021 a calles de la ciudad de Cortazar, donde estacionaron un vehículo de su propiedad y descendieron con el paquete explosivo.
Eduardo N se trasladó a la central camionera de la población y regresó en un taxi a la calle 5 de mayo, donde se encontró de nuevo con Georgina N. y se dirigieron a la calle Constituyentes, en Salamanca, cerca de las 16:00 horas.
Por medio de un mensaje, los ahora detenidos solicitaron el servicio de un repartidor de paquetería y fue Georgina N, quien entregó la caja a la pareja de motociclistas que harían la entrega. Según las pruebas periciales, ella especificó a los repartidores que la caja la debían de entregar directamente al dueño del bar y pagó el servicio.
A las 19:15 horas, los repartidores llegaron al lugar de destino, informando que el paquete debía ser entregado a Mauricio, dueño del establecimiento, quien de inmediato solicitó a uno de sus empleados, identificado como Mario Alberto que le ayudara a abrir el paquete y al manipularlo se generó la explosión que les provocó la muerte a ambos.
CITA:
“El evento, tal y como aconteció, nos ha conmocionado de distintas maneras y, por supuesto, que causa un miedo generalizado en la población; sin embargo, tenemos que ver las causas de cada uno de estos hechos y que nos llevaron a tipificar como un delito de homicidio calificado”
Carlos Zamarripa
Fiscal de Guanajuato
LEG