Desde septiembre se dio el aviso que hoy se realizaría la subasta del Porsche 911 Turbo S One of a Kind de Pedro Rodríguez. Asimismo se vislumbró que llegaría a una cifra impresionante y lo hizo: 11 millones 800 mil pesos.
La puja en las instalaciones de Morton Casa de Subastas en Ciudad de México tuvo un precio de salida de siete millones de pesos.
Vía telefónica, en línea y de manera presencial ofrecieron mayores cantidades para hacerse de una joya de la industria automotriz.
Fácilmente llegaron los ocho, con un poco más de trabajo los nueve, y a partir de los 10 millones, la puja dejó tres contrincantes, pero muy pronto a dos.
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De los 10 a los 11, una oferta más cabildeada que la anterior. Llegó el monto a 11. Ofertas más cerebrales.
200 mil pesos más bajaron a 100 mil y ahí se mantuvo la batalla. 11 millones 700 mil y después 800 mil. Ahí uno de los dos últimos sobrevivientes quedó tentado a hacer otra oferta.
No fue y el rival que hizo la última oferta escuchó por el teléfono el golpe del martillo que lo acreditó como el nuevo poseedor de está pieza única en el mundo, que enaltece el legado de Pedro Rodríguez.
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La relación entre la leyenda mexicana y la armadora alemana es eterna, así lo remarca Porsche, que en el proyecto planteó que lo recaudado tuviera un fin benéfico, pues es lo que el piloto habría deseado.
Al parecer, el nuevo dueño de este Porsche, es mexicano, por lo que se cree que el auto permanecerá en el país.
FF